Un oso anima las calles de Moscú tocando la vuvuleza sobre un jeep con motivo del Mundial

Casi 100 años después de su creación en 1930, la Copa Mundial de Fútbol sigue levantando pasiones y ampliando los límites de nuestra imaginación.

Cada cuatro años distintos países presentan sus candidaturas, ávidos de convertirse en los organizadores del mayor torneo internacional de fútbol. Este año 2018 le ha tocado el turno a Rusia, como ya sabes, siendo la primera vez que el torneo se organiza en Europa Oriental. Por supuesto los rusos no han dejado pasar la ocasión para demostrarnos sus mejores cualidades. Como por ejemplo, su pasión por los osos.

En el vídeo que encabeza este artículo se puede observar como un oso de carne y hueso atraviesa las calles de Moscú en un jeep soplando una vuvuzela. Quién nos iba a decir a nosotros que veríamos algo así.

La elección de un oso “trompetista” no es aleatoria, pues desde el Mundial de 2010 las vuvuzelas (las típicas trompetas largas de plástico que usan los aficionados para animar a sus equipos) se han convertido en el sonido distintivo de esta copa internacional.

Como se puede observar en el vídeo, la intención del animal —o mejor dicho, de sus dueños o sus cuidadores— era festejar la victoria de Rusia contra Arabia Saudí (5-0) junto al resto de la gente que salió a las calles bandera en mano. Pero al final la actuación de este oso ha terminado dando la vuelta al mundo como el vídeo más surrealista del Mundial.

Sin embargo, no es la primera vez que osos rusos amaestrados se presentan en una competición de fútbol. Ya a mediados de abril pudimos observar asombrados como un oso se encargó de entregarle el balón al árbitro antes de empezar el partido entre el Mashuk-KMV y el Angusht. Los rumores apuntaron entonces a que podría tratarse de un experimento de cara a la ceremonia inaugural del Mundial, pero los organizadores del Mundial se desmarcaron inmediatamente de la escena.

En Rusia, el oso pardo europeo es un símbolo nacional desde el siglo XVI, siendo venerado tanto por la Rusia zarista como por la Unión Soviética y hasta la Rusia federal de hoy. Su veneración surge de la fuerza y la astucia de estos animales, que son capaces de sobrevivir en las heladas tierras siberianas. Además de miles de logotipos, podemos encontrar osos rusos en obras de teatro o incluso en los dibujos animados, sin olvidar que la mascota de los Juegos Olímpico de Moscú en 1980 fue Misha, un adorable cachorro de oso cariturizado.

Por supuesto, los osos no sólo son símbolos decorativos, también se han convertido en mascotas adiestradas para diferentes eventos, como en el vídeo de este artículo. Pero es que incluso hay una pareja rusa que mantiene un oso como mascota doméstica ¡Mamma mía!

El Mundial sigue con Rusia aún en competición, así que los rusos todavía tienen tiempo para mostrarle al mundo el resto de cartas extrañas que tienen bajo la manga. ¿Podrán mostrarnos algo más surrealista que un oso en un jeep tocando la vuvuzela? Esperemos que sí.

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