Pasear con tu mascota, tu perro, es algo más que un placer. Es una necesidad para el animal y es un deber para su cuidador. Incluso si dispones de una finca por la que viva y corra, salir de esos límites acompañando a su amo —al que quiere con canina fidelidad— es un ejercicio sano para el animal. Y sí, para el dueño también.
Ahora bien, este vídeo nos aporta una experiencia muy distinta. Los espectadores de los hechos se llevaron una sumamente desagradable sorpresa mientras transitaban en domingo por una calle de la ciudad de Bakersfield (California, EEUU). Allí pudieron observar como una mujer, montada en un patinete eléctrico, llevaba sujeto por una correa a un perro de escasa envergadura y que responde al nombre de Zebra.
Desafortunadamente para el animal, la conductora del patinete —y que resultó no ser la propietaria del perro— iba a una velocidad superior a lo que las patitas del animal podían alcanzar. Así que el pobre animal fue arrastrado por el asfalto a una velocidad estimada de 15 kilómetros por hora. Sus patas sangraban.
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Las imágenes fueron recogidas por el sistema de cámaras de vigilancia de una de las casas situadas en el trayecto por el que el perro fue arrastrado. Corren además fotos por las redes sociales tomadas por testigos y en las que se ve a la mujer conductora sujetando al maltratado animal con una especie de mueca sarcástica, como intentando quitarle hierro al asunto. "Shit happens", asegura uno de esos testigos que le dijo la chica cuando la recriminó por lo que estaba haciendo.
La presencia de la policía se hizo necesaria ante la denuncia de algún testigo y ante el sangrado del pobre animal. Fue necesario llevar a la pobre mascota a un veterinario y, aunque se recupera debidamente ya en compañía de su legítimo cuidador, el responsable ha de afrontar una denuncia por maltrato animal.
Eso sí, si nos atenemos a la página de Facebook del dueño del sistema de seguridad que grabó la situación, James Dowell, la culpable puede darse por contenta con la multa que le caiga o las horas de servicio comunitario que previsiblemente le caigan. Lo que sea, antes que verse en manos de los ciudadanos que han comentado el incidente en el muro de Facebook. Como podéis adivinar, atarla a ella misma a un vehículo y arrastrarla, era la opción más popular. Y la más suave.
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