Aunque todos los testigos se temían lo peor al ver la caída, el mapache salió aparentemente ileso de su extraña aventura
Serpientes, arañas de más que discutible atractivo, cerdos vietnamitas a los que se supone muy cariñosos, tejones o… mapaches. La lista de animales domésticos es creciente en su variedad. Y también lo es la lista de incidentes y situaciones extrañas que se derivan de esas situaciones de convivencia poco naturales.
Un mapache es el protagonista del asombroso vídeo que podéis ver. Fue grabado por un ciudadano llamado Micha Rea el pasado 22 de septiembre en la ciudad de Ocean City (New Jersey, Estados Unidos). La gente reunida en la base de un edificio construido en una zona de playa contempla asombrada a un mapache que, cual Spiderman en versión animal, ha subido hasta una altura de nueve pisos por la fachada de la construcción. Se mantiene agarrado a una pared llana y totalmente vertical, con lo que nos hace asombrarnos del poder de sus garras y de su ausencia de nada parecido ni lejanamente al vértigo.
Las personas miran asombradas, han detenido sus trayectos para poder ver qué hará el mapache a continuación. También técnicos del Departamento de Control Animal local. ¿Va a intentar subir más o procederá a bajar cautelosamente? ¿Habrá que llamar a los bomberos, a la policía, a los de control animal o de plagas? ¿Aparecerá su propietario y cuidador?
Entonces surge la sorpresa: el mapache salta. Se suelta y salta. Se lanza deliberadamente al vacío como solo haría un suicida. Cae desde la altura de un noveno.
Y no, los mapaches no tienen entre sus dones, el de volar.
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Así que el animal impacta contra el suelo. Con un sonido sordo. Y suena así porque, afortunadamente, cae en un montículo arenoso y su masa no es muy elevada. Puede que eso sea lo que le permite ponerse sobre sus cuatro patas rápidamente y salir corriendo como si nada a esconderse en un agujero que tiene todo el aspecto de que le llevará a los sótanos o al garaje del edificio.
Esa prueba de vida, la carrera que le aparta del núcleo de mirones que estaba concentrado, logra arrancar incluso un puñado de aplausos del respetable.
Esperamos que el animal esté bien después de su loca aventura.
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