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Ocurría este fin de semana, durante la grabación de Saturday Night Live: la artista invitada esa noche era Katy Perry, los temas a interpretar serían Swish Swish, Bon Appétit y sus acompañantes durante la segunda canción, nada más y nada menos que Migos.
Y eso es lo que ocurrió. O, al menos, aquello que el público de Saturday Night Live pudo ver.
Entre bambalinas, la visión de las drag queens que acompañaron a Perry durante Swish Swish era otra muy diferente. “Durante los ensayos de Bon Appétit”, dice una de las bailarinas, “yo estuve de figurante con ellos todo el tiempo, durante los tres días que duraron las pruebas. Cuando llegó el momento de grabar, sin embargo, pidieron que me fuera”.
“Según nos dijeron, Migos no se sentían cómodos teniendo a drag queens cerca”.
Otra de las drag queens añadió: “escuché a una de las maquilladoras decir que finalmente no apareceríamos en Bon Appétit y, sinceramente, durante los ensayos, Migos no parecían muy entusiasmados de tenernos por allí”. Esta versión coincide con la de algunos miembros del equipo técnico de Saturday Night Live. “Inicialmente, había más drag queens en Bon Appétit”, dicen, desde el staff de SNL, “pero Migos se quejaron y el equipo de Perry tuvo que eliminar a la mayoría de drags que aparecían durante el show”.
Entre las drag queens que actuaron en Swish Swish, pero apenas tuvieron presencia en Bon Appétit, estaban Pattaya Hart, Svetlana Stoli o Vivacious de RuPaul’s Drag Race. Todas habían sido contratadas a través de World of Wonder, la empresa que, a su vez, ha destapado este caso de homofobia.
Aunque un representante de Capitol, el sello de Migos, ha tildado la historia de “completamente falsa y prefabricada”, no es la primera vez que el trío de rap ha generado polémica por el trato que le dispensan a la comunidad homosexual. Desde decir que las letras iLoveMakonnen dejaban de tener credibilidad después de su salida del armario, hasta que jamás actuarían en un club gay, Migos, los llamados ‘Beatles del Rap’, tienen las mismas posiciones sobre diversidad sexual que tenía, hace ya veinte años, el puto Eminem.
“Grabé un disco con Frank Ocean”, llego a excusarse Quavo, de Migos, utilizando su colaboración con el rapero bisexual.