Oh! Parece ser que estás usando adblocker y lo respetamos. Por eso podrás seguir disfrutando de nuestros contenidos sin problema pero quisiéramos pedirte que lo desactivaras para nuestro site. Ayúdanos a seguir adelante y a luchar por aquello en lo que creemos.
Culture
‘Assassination Nation’ es una mezcla de ‘Chicas Malas’ y ‘Black Mirror’
18 Julio 2018 14:14
El sonido de una notificación desata el infierno: el tráiler de Assassination Nation es un festival arrollador de clicks digitales, emojis, capturas de pantalla que, en su ecuador, y sin que te dé tiempo a tomar aliento, se transforma en un recopilatorio de bofetadas, ráfagas de disparos y turbas de gente enmascarada.
La nueva película de Sam Levinson arrasó en la última edición de Sundance, siendo definida por Eric Kohn de IndieWire como “la película de instituto más agresiva de la historia del cine”. Por lo que promete el tráiler, Assassination Nation podría ser un turmix explosivo en el que dan vueltas a mil por hora Chicas Malas, The Purgue o Black Mirror.
El filme tiene como premisa de partida un what if: ¿Qué pasaría si toda nuestra intimidad digital, todo lo que hemos hecho, dicho, visto y almacenado en Internet saliese a la luz? Assassination Nation parece tenerlo claro: caos, descontrol y selfies a bocajarro.
Assassination Nation arranca con figuras de primera línea del pueblo de Salem, como el alcalde, como el director del instituto local, que empiezan a ver violada su intimidad digital. La exposición de secretos empieza a permear también a ciudadanos con un perfil más bajo, momento en el cual Assassination Nation se desboca por completo.
Con un ritmo frenético al más puro estilo Guy Ritchie, con pantallas partidas a lo Brian de Palma, con el embotamiento sensorial estilo Asesinos Natos, lo nuevo de Sam Levinson se basta con un tráiler de dos minutos y medio para antojarse una de las cult movies que nos dejará este 2018, al nivel de Eighth Grade o Hereditary.
“Este es vuestro mundo”, dice la voz en off de la protagonista, mientras ella y sus besties empuñan armas automáticas. “Vosotros habéis construido esto”, añade, mientras una turba con el rostro cubierto recarga rifles y ondea banderas norteamericanas. “A mí no me miréis”, termina, “yo acabo de llegar”.
share