"Ojalá tenga una muerte lenta y agónica" o "que se muera ya ese vejestorio despreciable" son algunos de los mensajes compartidos en un grupo formado por cientos de agentes municipales
"La verdad es que yo me alegraría si sufriese un accidente y tuviese una muerte lenta y agónica. No creo que merezca otra cosa. Ella y todo su equipo de Gobierno", reza uno de los mensajes que llevan enviándose un centenar de policías municipales desde este verano.
El grupo se creó inicialmente para tratar las condiciones de los agentes policiales con turno de noche. Llegó a tener hasta 200 integrantes. Después de los insultos, mensajes de odio y amenzas- incluso a los propios compañeros- son muchos los que han ido abandonando el chat.
Uno de sus integrantes ha acabado denunciando el discurso de odio contínuo en el chat. El agente ha sido amenazado de muerte en varias ocasiones. "Cuando les recriminé que estaban usando un grupo de whatsapp sobre temas laborales para hacer llegar un discurso de odio fue cuando empezaron las amenazas de muerte", explica el agente a el diario.es. Tras su denuncia ha tenido que reforzar su seguridad y la de su familia.
"Ojalá explote La Sexta con todos ellos dentro y que ese día esté también Pablo Iglesias y Rufián", contiene uno de los mensajes. "Espero que ella (Ana Pastor) y su indeseable marido.
Ahora un juzgado de Madrid investiga este chat cargado de odio hacia la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y su equipo de Gobierno. Tampoco se salvan inmigrantes, políticos de izquierda y periodistas.
"Ojalá explote La Sexta con todos ellos dentro y que ese día esté también Pablo Iglesias y Rufián", contiene uno de los mensajes.
Según explica el agente que ha denunciado el chat, los mensajes comenzaron a compartirse a raíz de los atentados de Barcelona y Cambrils y alcanzaron máximos niveles de odio después de la celebración del referéndum ilegalizado del 1 de octubre.
Carmena tildó de "error terrible" las cargas policiales del 1-0. Tras sus declaraciones, el chat de los policías municipales se incendió. "Que se muera la zorra vieja ya", comenta uno.
"Lo que es terrible es que ella no estuviera en el despacho de Atocha cuando mataron a sus compañeros. Que se muera ya ese vejestorio despreciable", dice otro de los agentes. Se refieren a la matanza del 77 donde un grupo de extrema derecha mató a cinco abogados en Madrid. Todos eran de ideología izquierdista. Manuela Carmena se salvó porque le había dejado su despacho a un compañero para una reunión.
Según el denunciante, el número de agentes que compartía los mensajes de odio asciende a una docena. Tan solo un par de agentes se han atrevido a recriminarles los insultos. El resto de miembros del grupo se ha mantenido en silencio o les ha dado la razón.
Este policía ya había denunciando ante el departamento de Asuntos Internos de la Policía las amenazas, sin que de momento haya noticias de esa investigación. Habrá que esperar a que el juzgado número 49 de Madrid corrobore si se trata de un delito de odio.