Lo que ha dicho y lo que no ha explicado el presidente cesado desde Bruselas
Desde una sala abarrotada de periodistas en Bélgica el presidente cesado, Carles Puigdemont, empezaba su rueda de prensa más de 20 minutos tarde. Tal y como ya nos tiene acostumbrados.
Puigdemont ha comenzado su intervención asegurando que el déficit democrático del sistema judicial español ha obligado a parte de su gobierno a "desplazarse" hasta Bruselas, la capital de la Unión Europea, para denunciar las "graves injusticias y la situación de opresión del 155" y encontrar en el sistema belga garantías para que su Gobierno, ya cesado, sea juzgado democráticamente.
"El delito de rebelión conlleva 30 años de cárcel y es similar al delito de terrorismo. Nosotros no hemos cometido ningún delito con violencia, sino cumplir con nuestro mandato electoral de forma democrática", ha explicado el ex consejero Forn.
Puigdemont ha dejado claro que no va a pedir asilo, que su Gobierno no va a eludir la justicia y que no descarta en volver a Cataluña siempre y cuando se den las "garantías judiciales" necesarias. Puigdemont ha señalado que la Fiscalía castiga por "ideas políticas" tal y como se demostró con Los Jordis, en palabras del ex presidente. Por ello quieren asegurar que si vuelven será en condiciones justas.
También sostuvo que acatarán las elecciones del 21 de dicciembre. "La democracia está en las urnas así que allí nos veremos. Vamos a aceptar los resultados de unas elecciones impuestas. Queremos tener garantías de que el Gobierno español hará lo mismo y aceptará los resultados".
Lo que no ha explicado Puigdemont
El presidente cesado asegura que "siguen ejerciendo sus funciones de Gobierno al igual que el resto de diputados cesados en el Parlamento catalán". Sin embargo no ha entrado a explicar qué están haciendo exactamente los principales representantes del Gobierno que están suspendidos en funciones por el Gobierno central.
Añadió que se "está trabajando en iniciativas para combatir el 155 y recuperar las instituciones catalanas". En su discurso ha hablado de instituciones catalanas, proyecto catalán y Gobierno catalán. Ni una sola mención a la República declarada el pasado viernes. Tan solo ha mantenido que frente al 155 pide "seguridad, prudencia y moderación". Unas palabras que indican el regreso de la DUI a un estado de standby o más bien, al acatamiento de lo que se diga desde Madrid, danto por supuesto que Cataluña no es un Estado distinto al español.