La manifestación contó con 900.000 asistentes, según recoge Societat Civil. Pese a su carácter pacífico se dieron momentos de gran tensión, insultos y agresiones
La manifestación celebrada ayer contra el separatismo y a favor de la Constitución vivió momentos de tensión. Societat Civil Catalana, la asociación civil organizadora del evento y contraria al independentismo, asegura que un millón de personas asistió a manifestarse bajo el lema "Recuperemos el sentido común" y "No estáis solos".
La Guardia Urbana ha cifrado la participación en 350.000 personas, mientras que la Policía ascendía la cifra a 500.000. La Delegación del Gobierno todavía no ha dado una aproximación. Pero el baile de cifras sobre la asistencia no ha sido el único dato que ha "enturbiado" la pacífica manifestación que tuvo lugar en Barcelona.
A la cabeza de la marcha y tras la pancarta el escritor y Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, se situaba codo con codo junto al presidente del PP en Badalona Xavier García Albiol. A su lado también los líderes de Ciudadanos Albert Rivera y la parlamentaria Inés Arrimadas. La marcha comenzó de manera pacífica y plagada de banderas españolas, europeas y señeras.
Los momentos más tensos ocurrieron cuando parte de la multitud pasó frente a uno de los furgones de los Mossos d'Esquadra. Al grito de "Traidores, sois basura" y "No sois policías".
Tensión también en varias calles de Barcelona donde había colgadas banderas independentistas en los balcones. Algunos de los manifestantes increparon a quienes vivían en esos domicilios gritándoles "Esa no es nuestra bandera". Uno de los vídeos muestra como cinco manifestantes gritan "Hija de puta, baja aquí si te atreves" a una mujer que les decía desde el balcón que ella es catalana y que no iba a quitar su bandera. Otro momento muy parecido tuvo lugar en las Ramblas y en el Paseo del Born.
Gritos también de "¿Dónde está la alcaldesa?" o "Puigdemont a prisión".
Pese a que Societat Civil Catalana pidió expresamente que no se mostraran banderas pre-constitucionales que hiciesen alusión a la dictadura de Franco, los saludos nazis no faltaron. Tampoco la mano derecha alzada invocado el saludo fascista al sol.
Los momentos más violentos y, que de momento nadie ha condenado, fueron tres agresiones grabadas durante la manifestación. La primera a un chico marroquí. La segunda a un fotógrafo perseguido por más de cuatro manifestantes que acabaron tirándole al suelo.
La tercera fue en el metro de Barcelona, cuando un joven con la camiseta de la selección de fútbol española increpaba a un joven extranjero. El españolista da un golpe en la cabeza mientras le amenaza "¡voy a por ti, cuando te bajes!". Pocos segundos después le da una patada. Un momento que fue grabado por el resto de viajeros del metro que intentaban tranquilizar al agredido. "Lo tenemos todo grabado", aseguraban.
También una periodista de la cadena catalana TV3 fue insultada. Bajo gritos de "zorra" intentó retransmitir en directo la manifestación e incluso llegó a ser golpeada con una bandera española en la cara.