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El último spot de la Euroliga demuestra su americanización con un rap

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¿Bienvenidos a la NBA 2.0?

Omar Naboulsi

06 Octubre 2017 14:26

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¿Alguien se podía imaginar hace 15 años a Bodiroga, Papaloukas y Jasikevicius rapeando para un anuncio de la Euroliga?

La competición ha cambiado como de la noche al día en pocas temporadas, y la imagen de espectáculo y modernidad que quiere transmitir se ve en los spots publicitarios. En el último, varias de sus máximas estrellas se juntan para cantar en el videoclip de "Game On", la canción que ha escogido la Euroliga para presentar su nueva temporada, que empieza la semana que viene.

La verdad es que se adaptan bastante bien a la base:




En el vídeo se puede ver como Sergio Rodríguez demuestra todo su flow, a Vassilis Spanoulis disfrazado de rey y a Luka Doncic soltándose unas borras tumbado en la piscina, refresco en mano. También aparecen Luigi Datome, Edgaras Ulanovas, Adam Hanga, Bryant Dunston, Chris Singleton, Andrew Goudelock, Jason Granger y Norris Cole, todos protagonistas -a priori- en sus equipos esta temporada.

El cambio de imagen de la competición es claro: de la epicidad al espectáculo.



Esta nueva dinámica se ve perfectamente reflejada en el nuevo formato de la Euroliga, impuesto desde la temporada anterior. Estamos ante una competición cerrada, en la que juegan todos contra todos en una liga regular a la que solo acceden los mejores equipos de Europa puestos a dedo -o al menos los que más presupuesto tienen-. De hecho, un equipo que no tenga licencia para jugarla cada temporada solo puede colarse en el torneo si le invita la propia Euroliga o gana la Eurocup, su segunda competición, como es el caso de Unicaja de Málaga esta temporada.

El cambio de normas en el baloncesto FIBA también le ha venido como anillo al dedo. Con la inclusión del paso zero y la permisividad con los antiguos pasos de salida -sí, esas carreras que se pegan los jugadores con el balón en la NBA antes de botar también se verán en Europa- se favorece aún más el espectáculo en una competición que ha elevado su nivel y la asistencia a los pabellones a costa de convertirse en un coto privado.

Estamos viviendo la americanización de la Euroliga, y sus estrellas te lo cuentan rapeando.




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