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Los inicios de un grupo vienen acompañados de ciertos hábitos solo remediables con el TIEMPO, concepto estrella de los Conciertos Brugal Extraviejo: un homenaje al punto de maduración de nuestros grupos y artistas más reconocidos.
Como en todo proceso evolutivo, la proyección de un grupo pasa por el ensayo-error, un trayecto que paradójicamente termina definiendo a la formación con los años. Sin embargo, difícil es encontrar un artista consagrado que no se sonroje al recordar alguno de esos amateur mistakes que algún día cometió.
A continuación te presentamos -con cariño hacia los artistas, novatos y experimentados- algunos de los más comunes...
1. No respetar la armonía de los temas.
Exacto, ya no hablamos de desafinar, sino de algo más básico: no respetar el acorde de la composición, es decir, que los instrumentos suenen en escalas diferentes, lo que da la sensación de que todo suena desafinado. Esto suele pasarle a formaciones novatas que, con el ansia de comerse el escenario, se les pasa armonizar sus guitarras, bajos, etc.
2. Justificar los errores.
Excusarse porque esta canción es la primera vez que la tocamos con público o porque no hemos tenido mucho tiempo de ensayar no es propio de profesionales, pues denota inseguridad. ¿Imaginas a alguna banda 'llena-estadios' pidiendo disculpas porque no recuerda la letra de una canción? Seguramente no, pero... ¿quién te dice a ti que no les pasara en sus inicios?
3. Invitar a los colegas a subir al escenario.
Porque nos caen bien y tienen ganas de liarla con nosotros. Está bien darle cancha a los amigos, pero, si alguna vez has sido testigo de shows como este, apuesto a que no fue con bandas veteranas, sino con novatos entusiasmados con su momento de gloria. Y ojo, porque este punto es un claro ejemplo de cosas que te puedes permitir con el paso de los años, cuando ya te ganaste el respeto de tu público.
El éxito y el reconocimiento de un grupo solo llegan con el tiempo y tras hacer las cosas bien. Algo muy parecido a lo que pasa con el buen ron, aquel que sabe madurar para llegar a su mejor versión.
Es cierto que hay estrellas mundiales que no solo tocan las mismas canciones en cada concierto, sino que además tienen guionizadas las intervenciones con el público, lo cual se podría considerar profesionalidad extrema. Pero no es menos verdad que hay algo amateur en el hecho de que una banda con 10 años tire siempre del mismo setlist. Al fin y al cabo, la evolución también es riqueza.
5. Querer tener videoclips y grupies antes que un buen disco.
El afán por llegar lejos hace que muchas bandas se obsesionen con cosas que poco tienen que ver con lo meramente musical. La imagen importa, es cierto, pero la condición de rockstar llega con el tiempo. Pasa igual con aquellos que ya nacen con manager, incluso antes de tener maqueta. La intención no es mala chicos, pero ¿qué tal si primero debutamos y después nos ocupamos del business?
6. Tener el discurso de un futbolista.
Si alguien forma una banda es porque tiene algo relevante e inédito que expresar. Incluso si se trata de una banda tributo, eso no quita para que tenga personalidad propia, carácter. Esta es seguramente la virtud que más ganan los grupos con el tiempo: diferenciación. Tener perfectamente definido el sonido y el concepto, además de ganar fieles, impone respeto en la crítica.
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Incluso los artistas y grupos más consagrados cometieron errores de principante en algún momento. Afortunadamente, el resultado y la calidad de un disco o un directo mejoran con el tiempo. Se llama maduración y de eso sabe un rato Ron Brugal Extraviejo.
Los maestros roneros de Ron Brugal Extraviejo saben que si hay un ingrediente clave es el tiempo. 8 años para ser más exactos. Como 8 son los Conciertos Brugal Extraviejo, en los que actuarán artistas que hemos visto madurar muy de cerca:
