Un año más llega el concurso que premia la cara más absurda y divertida de la fotografía de animales
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A todos nos entretiene hacerlo, y eso es algo que la Born Free Foundation ha sabido aprovechar para llamar nuestra atención sobre la conservación de la fauna de nuestro planeta. Porque esa es la motivación fundamental de los The Comedy Wildlife Photography Awards, un concurso que nos trae fotos graciosas de simpáticos animales.
Fundado por los fotógrafos y aficionados a la fauna salvaje Tom Sullam y Paul Joynson-Hicks, este año han recibido cientos de fotos que tuvieron que reducir a 41 finalistas. En el vídeo que encabeza estas líneas has podido ver a nuestros favoritos de entre todos los nominados.
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"Lo mejor de este concurso es que los animales nos divierten sin saber que lo están haciendo", dicen desde la organización. Y tanto. ¿A quién no le hace gracia ver a un rinoceronte con tutú? ¿O a una leona fingiendo dolor de cabeza ante su pareja?
El premio principal del concurso se anunciará en noviembre y será para la imagen que, según el jurado, muestre la "mejor excelencia técnica" y el "contenido y subtítulo más divertidos". El ganador recibirá un trofeo y un safari fotográfico de una semana para dos personas en la reserva Maasai Mara de Kenia.
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El premio del 2017 se lo llevó Tibor Kercz con el retrato de este torpe búho que parece caerse de una rama.
Los organizadores de esta iniciativa explican que nació de dos necesidades principales. La primera, crear un concurso de fotografía alegre, optimista y sin pretensiones, básicamente sobre la vida salvaje haciendo cosas divertidas. La segunda, y mucho más importante, esta competición es sobre conservación.
Es obvio que todos, en algún momento, haremos algo que impacte negativamente en la vida de los animales que comparten el planeta con nosotros. Desde coger un avión o coche que contamina, a usar plásticos en bolsas o envases. No somos perfectos, y no podemos proteger el medio ambiente de todo.
Pero el objetivo de este concurso es que al menos seamos conscientes del problema y lo compartamos con nuestros conocidos. Nadie va a la oficina a dar datos sobre el calentamiento global o el número de especies en peligro de extinción. Pero sí podemos difundir estas fotos graciosas entre los amigos y darles pie a la reflexión.
Quizás no parezca demasiado, pero es un comienzo.
Nosotros, desde PlayGround, también queremos contribuir a nuestra manera, y por eso denunciamos siempre los casos de maltrato animal, ya sea por sus condiciones de vida en los zoológicos o por los humanos estúpidos que les molestan.
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