PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo ¿Pescar aburrido? Este vídeo es la prueba de que la pesca también puede ser un deporte de riesgo Content

Content

¿Pescar aburrido? Este vídeo es la prueba de que la pesca también puede ser un deporte de riesgo

H

 

El sorprendente momento en el que unos pescadores luchan contra un marlín negro

Playground community

14 Junio 2018 08:52

Para este grupo de pescadores australianos la pesca se ha convertido en algo más que un deporte tranquilo. Durante su travesía pescaron, sin saberlo, un sorprendente pez de gran tamaño que saltó al bote. Se trataba de un marlín negro de unas 600 libras, cerca de 300 kilos. Una anécdota que no olvidarán, sobre todo uno de los pescadores que se zambulle por la borda para evitar ser alcanzado por el hocico puntiagudo de la criatura. De hecho el animal golpea una silla con la cabeza cuando salta dentro del barco partiéndola con su fuerza. Afortunadamente, nadie resultó herido.

Ni tan siquiera el marlín negro pudo ser capturado. Hablamos de un animal que puede alcanzar los cinco metros de longitud y que es un trofeo muy preciado por pescadores deportivos, no solo por su tamaño sino también por su persistencia, tal y como se puede comprobar en este vídeo.

El marlín negro vive en aguas tropicales de los océanos Índico y Pacífico. Es rápidamente identificado por tener aletas pectorales rígidas que no pueden plegar contra el cuerpo y por sus aletas ventrales demasiados cortas. Su cuerpo es de color azul pizarra en el dorsal y blanco plateado en la zona de la panza. Sin embargo, la principal característica de los marlines es su prolongación de la mandíbula superior mucho más larga que la inferior, lo que resulta en un morro muy parecido al del pez espada. De hecho, son familia del pez espada y del pez aguja.

Estas criaturas son muy comunes en la pesca deportiva con caña y carrete. Para su captura se utilizan cebos vivos como caballas, bonito o calamares. Para pescar un ejemplar de marlín negro hay que tener paciencia y mucha, pero que mucha práctica. Esta práctica unida a la destreza del patrón a la hora de maniobrar el barco son el tándem perfecto para conseguir pescar este ejemplar.

Otra región muy conocida por la pesca del marlín negro es Cabo Blanco en Perú. Cuentan los lugareños que fue allí, en el año 1953, cuando se estableció el primer récord de pesca de este ejemplar. Alfred Glasell Junior consiguió atrapar una pieza de más de 4 metros de longitud y 707 kilos. Los ecos de esta historia se multiplicaron por miles hasta llegar a los oídos del autos de El viejo y el mar. Sí, el novelista Ernest Hemingway viajó a Cabo Blanco atraído por la leyenda del marlín negro. A día de hoy los concursos de pesca representan el 30 o 40% de la economía de Los Cabos.

En cualquier caso, ver un marlín negro de cerca es todo un espectáculo. Y más aún observar cómo consigue zafarse del anzuelo y volver al mar a base de fuerza y nervio. Los pescadores saben de lo complicado que resulta su pesca y quizás sea ese el motivo por el que muchos acuden cada año al continente australiano en busca de esta experiencia.

Vídeos relacionados:

share