VíTodos tenemos planes, proyectos y sueños ligados a ese momento feliz en el que la lotería o algún otro juego de azar nos convierta de repente en potentados. O en más potentados aún, si ya eres uno de los bendecidos por la Diosa Fortuna. Pero pocos tan atrevidos como el magnate y científico ruso Igor Ashurbeyli, que ha iniciado el proceso para crear una nación en el espacio. Ahí es nada. La primera nación humana extra-terrestre.
Asgardia es el nombre de esa nación y está tomado de la Mitología Nórdica. Ashurbeyli hizo pública esta propuesta a finales de 2016 con el objetivo de “abrir el acceso a la tecnología espacial, proteger la Tierra de amenazas cósmicas y fomentar la Paz”. Y como no todo lo que hay que obtener está en los cielos, una de las primeras metas que Asgardia quiere lograr es ser admitida en la ONU y ya está intentando cumplir todos los requisitos que esta organización solicita de los potenciales candidatos.
En cuanto a las metas celestes, se trata de crear una colonia que esté en órbita con la madre Tierra. Hay que decir que van bastante rápido. Tras la Declaración de finales de 2016, justo un año después, pusieron en órbita su primer satélite. O sea, ya hay algo de espíritu asgardiano en el Espacio: contiene datos de afiliación y un ejemplar de su Constitución.
Por el momento hay 200.000 ciudadanos registrados y originarios de 200 países distintos. Tú mismo puedes solicitar ser parte de la nueva nación inscribiéndote en su web, si bien es cierto que se te someterá a exámenes de inteligencia y capacidad antes de considerarte ciudadano. Parlamentarios, ya tienen. 143, generados en 13 distritos terráqueos distintos en los que se hablan idiomas tan variados como el inglés, chino, español o francés. También tienen Constitución. Y un debate sobre ella: ha sido aprobada, sí, pero por menos del 75% de los ciudadanos asgardianos. Por cierto, es Reino de Asgardia: una Monarquía Constitucional.
Para ir sumando, este pasado 26 de junio Asgardia ha celebrado la inauguración oficial de su autoproclamado Estado. Este acto no pudo celebrarse en el espacio así que se conformaron con el palacio Hofburg de Viena. Debe ser otro toque monárquico. Fue este un pomposo y algo extraño acto oficial autofinanciado que incluyó un mensaje del cosmonauta ruso Oleg Artemiev desde la Estación Espacial Internacional. Para empezar (¡qué menos!) Ashurbeyli ha sido nombrado cabeza de la nación por cinco años.
Todo esto puede sonar a un muy básico principio de Star Trek o Espacio:1999, pero fantasías televisivas aparte, la Humanidad hace mucho que decidió que su medio natural es expandirse por el Espacio.
Alguien ha de dar el primer paso.
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