El ‘caso Blevis’ ha provocado una ola de protestas en Estados Unidos. La muerte de un hombre afroamericano ha levantado la ira de varios sectores de la población, y la policía ha tenido que hacer público el vídeo de lo sucedido
Uno de los mayores problemas de Estados Unidos es el gran número de muertes por armas de fuego que ocurren al año en el país. En tiempos recientes, hemos visto numerosos tiroteos en institutos, incidentes provocados por bandas callejeras y otras situaciones impensables en la mayoría de lugares del mundo civilizado.
No obstante, uno de los problemas de este tipo que más preocupan a la población son las muertes causadas por miembros de la policía mientras están de servicio. En los últimos años, han salido a la luz un gran número de casos de agentes de la ley que acaban con sospechosos en un momento de tensión. Agentes que se exceden en su uso de la fuerza o que aprietan el gatillo en situaciones en las que, según sus reglamentos, no deberían disparar.
En este vídeo, podemos ver precisamente uno de estos incidentes. El pasado 23 de junio, dos oficiales de policía de la ciudad de Minneapolis dispararon a un sospechoso al que llevaban un minuto persiguiendo, según fuentes oficiales. Tras varios avisos exigiéndole al hombre que se detuviera, uno de los agentes decidió vaciar su cargador contra el sospechoso.
Seis tiros por la espalda.
Balas que resultaron mortales.
Blevis se quedó en el suelo desangrándose, mientras los agentes esperaban a que llegasen los refuerzos.
En el vídeo que encabeza estas líneas podemos ver a Schmidt, uno de los autores de los disparos, gritando frases como “¡Para! ¡Para! ¡Para! ¡Pon las manos arriba, o te juro que disparo!”.
El sospechoso, Thurman Blevis, un hombre afroamericano, le responde a la carrera asegurando que no es culpable de nada y que no entiende por qué le persiguen. Suplicaba al oficial que no le atacase, pero aún así no se detuvo en ningún momento.
—Venga, hombre. Yo no he hecho nada, tío.
—Llevas un arma, tú cabrón.
—No llevo ningún arma.
—Sí la llevas. Déjala en el suelo. Te voy a disparar.
—Por favor, no me dispares.
—Pon las manos en alto.
—Dejadme en paz.
El caso ha provocado una gran polémica entre varios sectores de la población, que bajo el lema “Black Live Matters” demandan que se encarcele a los agentes responsables de la muerte de Blevis. A la luz de las protestas, el departamento de policía de Minneapolis se ha visto forzado a hacer públicas las imágenes de lo sucedido.
El incidente está siendo investigado por la Oficina de Detenciones Criminales del Departamento de Seguridad Pública de Minesota. A la espera de sus conclusiones, el departamento de policía ha mostrado su apoyo a los agentes implicados en el suceso. El teniente Bob Kroll, presidente del Sindicato de Policía de Minneapolis, ha ido un paso más allá atreviéndose a describir la acción de sus compañeros —el disparar por la espalda a Blevis— como “heróica”.
En Estados Unidos son muchos los casos de hombres de raza negra abatidos por oficiales de policía. Un estudio elaborado por el diario británico The Guardian en 2016 señala que los varones afroamericanos tienen una probabilidad nueve veces mayor de morir a manos de un agente de la ley que los caucásicos. Durante los últimos años, las protestas debido a este hecho se han sucedido en la mayoría de ciudades importantes del país.
En el caso de Blevis, la acción policial se apoya en el convencimiento de los agentes de que el sospechoso portaba un arma de juego. Sin embargo, muchos son los que afirman que el hombre solo tenía una botella en la mano cuando fue abatido.