Cuando creías que lo habías visto todo en materia de intolerancia y mala fe vecinal, se cruzan en tu vida momentos y situaciones como estos que te demuestran lo contrario.
Los hechos recogidos por el vídeo tuvieron lugar recientemente en Estados Unidos y son una muestra de las situaciones de racismo a las que se ve expuesta diariamente buena parte de los habitantes no blancos del país. Hechos agravados, cómo no, por las políticas extremistas de su presidente, Donald Trump.
Primera muestra: 4 de julio, celebración familiar en el patio trasero de casa. Una familia y amigos de origen hispano celebran como cada año el día grande de su país, el Día de la Independencia. Celebración que, por cierto, conmemora precisamente el día en que Estados Unidos firmó la Declaración de Independencia y proclamó su separación del Imperio Británico, convirtiéndose al fin en un país creado, básicamente, por inmigrantes.
De repente, un sujeto irrumpe en escena agrediéndoles verbalmente. “¿En serio estás haciendo esto el 4 de julio? ¿Quieres venir a mi país a hacer esto?”, les suelta exaltado, entre otros varios improperios. Por si te lo estabas preguntando, ‘esto’ consistía en escuchar una canción en español durante la celebración. Escucharla en el espacio privado de su propia casa.
Ivette Calderón, uno de los miembros de la familia, ha compartido en Facebook la grabación, que ya cuenta con casi un millón y medio de reproducciones, acompañaba de un hashtag (#neverhadaproblemuntil2018) y el siguiente texto: “Entonces, ¿en una barbacoa familiar en el patio trasero no se nos permite tener música en español porque es irrespetuoso con el país?”.
Por si no has tenido suficiente con este, aquí otro ejemplo reciente del asedio al que se ven expuestas estas comunidades en el país. Esta vez es una mujer la que padece el hostigamiento físico y verbal de un hombre durante casi 15 minutos por, simplemente, llevar una camiseta con la bandera de Puerto Rico.
Increpada por un hombre en un parque público en el que se encontraba celebrando un picnic de cumpleaños, la mujer intenta explicarle al hombre por activa y por pasiva por qué Puerto Rico es también parte de los Estados Unidos de América aunque no sea un estado oficial.
Él, erre que erre, se acerca cada vez más a ella (hasta el punto de casi entrar en el acoso físico) mientras no deja de increparla por lo que lleva, soltando perlas como "no deberías llevar eso en los Estados Unidos de América”. Por si eso fuera poco, la mujer, que mantiene la calma y la compostura durante toda la grabación, intenta llamar la atención de un policía cercano que decide ignorarla a pesar de estar viendo con sus propios ojos el hostigamiento al que está siendo sometida. Policía que, por cierto, está siendo investigado por su pasividad.
Dos incidentes ocurridos en apenas una semana que se suman a otros muchos similares y que no hacen sino demostrar que el país presidido por Trump tiene mucho camino por recorrer en lo que a la integración de sus comunidades se refiere. Las acitudes racistas crecen día tras día en EEUU.