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Hace ‘striptease’ en la oficina bancaria para conseguir un préstamo

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¿Cómo reaccionó el gerente de la oficina?

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18 Enero 2019 21:26

Hay maneras de llegar a acuerdos económicos que no se enseñan en las Escuelas de Negocios. Porque, que levante la mano quién no necesite o a quién no le venga bien un empujoncillo de dinero. Claro que sí: altos, bajos, guapos, feos, más listos o más cortos. “Money, money”, que cantaban en Cabaret. Haríamos mucho, casi cualquier cosa por ello.

Pero hablemos de un préstamo bancario. Vas y lo pides. Y la respuesta va a ser siempre la misma: “¿Y las garantías? Porque tienes garantías, ¿verdad?”. Y la mujer coprotagonista de este vídeo grabado por una cámara de seguridad de una entidad bancaria bien hubiera podido responder: “Claro. Aquí están mis dos sólidas garantías”. Es difícil calcular la talla con el pixelado, pero no era menor...

La escena que ves en el vídeo de arriba ha sucedido en la ciudad rusa de Kazan. Un comercial bancario está discutiendo con una mujer llamada Yulia Kuzmina. Discusión en términos razonables, aunque hablaran de dinero. Doña Yulia quería un préstamo. Y cuando empezó a notar que el banquero no estaba muy por la labor de aflojarle la lana, la señora Kuzmina optó por envidar, que diría un jugador de mús. Y echó mano de lo que ella creía que le podría allanar el camino hacia el dinero: sus senos.

Un leve striptease. Una exhibición como una promesa. Una garantía adicional de que el banco recuperaría, sino su dinero, algún otro valor. Y quién dice el banco, dice el bancario que ha de dar el visto bueno.

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Hasta aquí podemos echarle humor. Pero claro, cuando se lee después que la situación económica de Yulia no es boyante y que ese acto fue el resultado de una sensación de cierta desesperanza ante su futuro, la anécdota y el vídeo pierden la gracia original.

El problema es que ella ha perdido también la oportunidad de ese crédito. Al menos, en ese banco. Su situación no es solvente. Y los contornos de su persona, más o menos pixelada, ya recorren los mentideros de internet.

Es lo que pasa con el Humor. A veces rascas un poco y se vuelve inmensamente triste y desamparado.

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