PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo Insultos y explotación: la triste realidad detrás de Lil Tay, la polémica youtuber de 9 años Culture

Culture

Insultos y explotación: la triste realidad detrás de Lil Tay, la polémica youtuber de 9 años

H

Lil Tay.
 

Actúa como un rapero duro. Pero está siendo claramente explotada por su madre y hermano adolescente

Elena Rue Morgue

28 Mayo 2018 14:01

A sus 9 años, Lil Tay es una de las grandes estrellas de las redes sociales, y lo es por todos los peores motivos.

Sus vídeos son incómodos de ver. Se supone que es humor, pero cuesta bastante encontrarles la gracia. El caso es que la estrategia funciona, porque Tay tiene 2 millones de seguidores en Instagram y 200.000 en YouTube, habiendo subido solo 3 vídeos.

El estilo es está claro: una cría hablando y comportándose como un rapero, tirando billetes, fanfarroneando por decir que tiene cochazos y mansiones, usando las palabras “bitch” y “nigga” cada tres segundos y medio…

Pretende ser comedia, pero lo cierto es que solo genera rabia y lástima. Es evidente que una cría de esa edad no tiene ese discurso por sí misma, y mucho menos tiene la capacidad de hacer de él un negocio.

La mente detrás de este business es su hermano mayor Jason Tian de 16 años. Su madre, Angela Tian, es claramente cómplice de todo el asunto. Al fin y al cabo, ella debe de ser la que se esté embolsando el dinero que ganan usando a Lil Tay como monigote.

Al parecer ni los coches ni las casas de los que presume le pertenecen. Su madre es agente inmobiliaria, y ha tenido que dejar el trabajo después de que su jefe viera que Lil Tay había usado su coche de empresa en uno de sus vídeos.

Lil Tay no va a la escuela, ahora estudia desde casa. Mucha gente la odia. Demasiada. Y no tienen problema en hacérselo saber en comentarios en Internet.

O en mitad de la calle si se cruzan con ella.

Adultos increpando a una niña sin querer hacer el esfuerzo de reconocer lo evidente: que la están obligando a hacer cosas que ella no entiende. Cosas que pueden determinar el resto de su vida.

Mientras algunos la llaman “china de mierda” o la animan a suicidarse, muchos otros — con un par de dedos de frente — muestran su preocupación por ella.

"Está bien, tenemos que iniciar una operación para salvar a Lil Tay, no es un pedazo de mierda, solo es una niña a la que le están diciendo que se comporte como un pedazo de mierda".

Con el hashtag #SaveLilTay muchos usuarios están denunciando la situación de vulnerabilidad, manipulación y explotación que vive la niña.

"Lil Tay es una niña. La están manipulando y está siendo explotada por su familia para conseguir visitas. Si esto sigue pasando va a estar jodida el resto de su vida. El hecho de que algunos capullos le estén haciendo bullying a través de Internet probablemente no esté ayudando"

Incluso hay quién pone de evidencia la falta de implicación de familiares que no parecen involucrados en su bienestar. Que su padre intervenga parece una cosa difícil, ya que su Angela es madre soltera.

"Pregunta seria. ¿Qué está haciendo el padre de Lil Tay mientras su hermano y su madre la explotan".

Y la intervención de los servicios sociales.

En Change.org hay una petición para que sus cuentas sean eliminadas de Internet.

Aunque su presencia en Internet lleva meses siendo potente, se disparó al aparecer en el vídeo que mejor representa el patetismo youtuber: la pelea entre Danielle Bregoli alias Bhad Bhabie y Woah Vicky.

En una reciente entrevista de la periodista Juju Chang para ABC News, Angela aseguró que “si mi hija está ganando dinero, me aseguraré de apartarlo para que tenga todo lo que necesite más adelante”. Después de que madre e hija pusieran en escena el teatrillo de familia feliz, Chang le mostró a la niña un vídeo en el que se la ve llorando por la presión mediática que sufre.

“No pareces muy feliz aquí”, le dijo la presentadora. Ella trata de aparcar el incidente en el pasado como buenamente puede hacerlo una persona de 9 años. “Quiero decir… eso era antes” dijo. “En plan… ahora soy más feliz que antes”.

Aunque su madre haya declarado estar muy tranquila con respecto al bienestar de su hija, parece que el cash está cegando bastante su sentido común. “No estoy preocupada, tenemos una familia con fundamentos firmes y siempre le recuerdo que esto es parte de la industria del entretenimiento”, declaró.

share