Un Burning Man en casa: así son las fiestas de moda entre la élite de Sillicon Valley

Los gurús de Sillicon Valley definen las fiestas de Jess Magic con un “ son como las drogas, pero sin la parte mala”. Accesibles sólo con invitación, estos Soul Salons suponen la escapatoria perfecta para los workaholics que han olvidado cómo conectar con el resto de la humanidad en su tiempo de ocio.

Jess, la cantante y maestra de ceremonias de los Soul Salons, ofrece una especie de Burning Man en miniatura. En ellos, todos los emprendedores que dejaron de lado amistades y relaciones para centrarse en su carrera pueden olvidarse de su soledad durante el show new age de Jess, que se transforma en Ms Magic durante sus bolos.

En un formato que Jess ha bautizado como convercanciones, el ambiente místico de festival al aire libre se instala en salones de los más pijos. Ms Magic combina en su espectáculo algo de rap filosófico con jam sessions de ukelele en mano, permitiendo que a su público, empleados de startups tecnológicas punteras, participen haciendo freestyle sobre su base.

La carrera de Jess Magic como cantante siempre ha tenido contactos con la plana mayor de Sillicon Valley: la artista actuó, por ejemplo en la fiesta de cumpleaños de Necker Island, fundador de PayPal, ante invitados como Peter Thiel o Elon Musk.

La convercanciones suelen empezar con un tema concreto —por ejemplo, el cambio climático— que sugiera a los presentes frases clave. Jess, entonces, empieza a acompañar el debate con una melodía, hasta que la música se funde con las voces. A partir de ahí, la improvisación se adueña de estos Soul Salons.

La iniciativa, de carácter itinerante, ha empezado un tour que excede Sillicon Valley: con fechas que cubren eventos privados y públicos, a un precio de 35 dólares la entrada, Ms Magic pretende llevar sus convercanciones a ciudades como Nueva York o Londres.

¿El objetivo último de las fiestas? Sacar “el niño interior” de entrepreneurs clase-A cuyos trabajos no les permiten disfrutar de vidas sociales activas.