Andria Zafirakou es profesora de arte en una de las zonas más pobres de Reino Unido
Andria Zafirakou, una profesora de arte y textiles en la escuela comunitaria de Alperton — en Bent, al noroeste de Londres — ha sido nombrada la mejor profesora del mundo por la Fundación Varkey.
El talento para enseñar de Zafirakou, primera persona británica en conseguir este premio, ha sido reconocido con mucho más que palabras: la fundación ha recompensado su trabajo con un premio de un millón de dólares, unos 812.000 euros.
Tras recibir el premio Zafirakou se convertirá en embajadora mundial de la fundación Varkey. Tendrá que seguir trabajando como profesora al menos otros cinco años, y podrá gastar como decida el millón de dólares que ha ganado y que será pagado en forma de nuevos medios para la escuela.
La gala tuvo lugar en Dubai con la presencia de celebridades como el ex vicepresidente de los Estados Unidos Al Gore, el ex primer ministro Tony Blair y el campeón de la Fórmula 1 Lewis Hamilton.
Theresa May, que no estaba presente, felicitó a la profesora en un vídeo pregrabado por “todo lo que había hecho”. “Ser una gran profesora requiere resilencia, ingenio y un corazón generoso. Estas son las cualidades que compartes con tus alumnos cada día. Así que gracias por todo lo que haces y continúas haciendo”, dijo la primera ministra.
Zafirakou por su parte se mostraba alucinada con la situación: “Estaba en shock, completamente abrumada, no podría creer que fuese yo”, dijo a los periodistas. Considera que este premio es un reconocimiento a todos los profesores británicos que “que trabajan muy duro”: “Este premio es para todos nosotros”, dijo.
Sobre qué hacer con ese dinero, todavía no lo ha decidido: “Voy a ser paciente, voy a reflexionar pero como sabéis sería fantástico si pudiera pensar en la forma en la que las artes pudieran ser más celebradas en nuestra comunidad escolar”.
El colegio en el que trabaja Zafirakou está situado en una de las zonas más pobres del país. Entre sus alumnos hay una gran diversidad cultural, y se hablan unos 130 idiomas diferentes en el área. Para ayudarles a sentirse integrados, Zafirakou aprendió frases básicas en diferentes lenguas, como el hindi, y visitó los hogares de sus familias.
Fue así como descubrió que muchos de sus estudiantes vivían en casas en las que, por sus pocos recursos, varias familias se ven obligadas a compartir una sola propiedad. “Normalmente está tan lleno de gente y hay tanto ruido que algunos alumnos me han dicho que hacen sus deberes en el baño para poder tener aunque sea unos momentos a solas y poder concentrarse”.
“He visto como el arte puede ayudar a los estudiantes a comunicarse. El arte les da tanta confianza y realmente crea gente joven increíble”, explicó pidiendo más asignaturas creativas en las escuelas.
