PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo El miedo también es quedarse sin dinero, sentir ansiedad, despertarse solo Lit

Lit

El miedo también es quedarse sin dinero, sentir ansiedad, despertarse solo

H

 

Un poema de Raymond Carver para recordar que lo que más nos asusta no proviene del inframundo

Eudald Espluga

31 Octubre 2017 10:56

Es 31 de octubre. Lo sabemos porque en el metro hay una chica disfrazada de payaso diabólico. Porque de los puestos de castañas cuelgan caretas de Frankenstein. Porque en los seminarios de literatura se habla de Bram Stoker y Mary Shelley y Edgar Allan Poe. Porque han estrenado Stranger Things. Porque es un buen día para reivindicar a las mujeres que escriben y escribieron historias de terror.

Pero lo cierto es que entre monstruos y espectros, entre zombis y muñecas demoníacas, tendemos a olvidar que el horror no solo proviene del inframundo, sino que lo grotesco habita también en nuestro día a día. El miedo no es una emoción extraordinaria, un sistema de alarma que se dispara únicamente ante lo paranormal.

LEER MÁS: Lasciva, política y mucho más violenta: así es la misteriosa versión islandesa de Drácula

Precisamente por ello, el 31 de octubre parece el mejor día para recuperar "Miedo", el poema de Raymond Carver en el que se habla de otros tantos miedos: miedo a la pobreza, a la irracionalidad de la injusticia, a la soledad y al abandono.

El escritor norteamericano ha pasado a la historia de la literatura como epítome del realismo sucio, de una novelística que en vez de rehuir la miseria de nuestra cotidianidad —la violencia de los silencios compartidos, la soledad de la vida familiar— la embiste con un estilo árido y sereno. Este poema, publicado en All of us: the collected poems, y traducido por Jaime Priede, resume perfectamente su concepción del mundo y la literatura.

Y nos recuerda, claro, que el miedo a la muerte tiene poco que ver con esqueletos y caramelos, con sangre falsa y telarañas de azúcar.

Miedo — Raymond Carver

Miedo a ver un coche de la policía acercarse a mi puerta.

Miedo a dormirme por la noche.

Miedo a no dormirme.

Miedo al pasado resucitando.

Miedo al presente echando a volar.

Miedo al teléfono que suena en la quietud de la noche.

Miedo a las tormentas eléctricas.

¡Miedo a la limpiadora que tiene una mancha en la mejilla!

Miedo a los perros que me han dicho que no muerden.

Miedo a la ansiedad.

Miedo a tener que identificar el cuerpo de un amigo muerto.

Miedo a quedarme sin dinero.

Miedo a tener demasiado, aunque la gente no creerá esto.

Miedo a los perfiles psicológicos.

Miedo a llegar tarde y miedo a llegar antes que nadie.

Miedo a la letra de mis hijos en los sobres.

Miedo a que mueran antes que yo y me sienta culpable.

Miedo a tener que vivir con mi madre cuando ella sea vieja, y yo también.

Miedo a la confusión.

Miedo a que este día acabe con una nota infeliz.

Miedo a llegar y encontrarme con que te has ido.

Miedo a no amar y miedo a no amar suficiente.

Miedo de que lo que yo amo resulte letal para los que amo.

Miedo a la muerte.

Miedo a vivir demasiado.

Miedo a la muerte.

Ya he dicho eso.

share