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Compañías chinas están extrayendo datos directamente del cerebro de sus empleados

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Varias empresas colocan sensores en los cascos de los operarios para medir picos de depresión, fatiga y estrés. Los críticos señalan que en realidad es "vigilancia emocional"

PlayGround

02 Mayo 2018 11:53

Varias compañías de China han empezado a monitorear las emociones de sus empleados. Más de una docena de empresas dedicadas al sector eléctrico o de transporte público se valen de sensores, implementados de forma inalámbrica en los cascos de los trabajadores, que detectan cómo transcurre la actividad emocional.

Los dispositivos permiten a las empresas controlar los picos de depresión, fatiga, estrés, ira y otras emociones a través de lo que revelan las ondas cerebrales.

Según aparece en South China Morning Post, estos sensores han sido adoptados por corporaciones con trabajadores en puestos de “alto riesgo”, como conductores de trenes y empleados de suministro de energía.

La compañía energética State Grid Zhejiang Electric Power alegó que el sistema reduce los accidentes laborales y posibilita implementar mejor los descansos. La empresa además afirmó que los beneficios incrementaron en 315 millones de dólares (262 millones de euros) desde que incorporó los sensores en 2014.

En otra compañía, Ningbo Shenyang Logistics, aseguraron que los utilizan para comprender mejor a sus empleados. Según recoge el periódico chino, en esta ocasión la empresa “capacita” a sus trabajadores mientras simula escenarios del entorno laboral con cascos de realidad virtual que integran los sensores.

“Ha reducido significativamente el número de errores cometidos por nuestros trabajadores", dijo el gerente Zhao Binjian al medio. Sin embargo, no aclaró por qué este sistema no se reducía a los aprendices. Todos los trabajadores estaban sometidos a él.

Críticos y escépticos con las bondades de estos sensores de inteligencia artificial señalan que supone una “vigilancia emocional”. El espionaje a las emociones de los empleados podría conllevar consecuencias no deseadas como despidos o una degradación en las funciones.

“No existe una ley o regulación que limite el uso de este tipo de equipo en China. El empresario puede tener un fuerte incentivo para usar la tecnología para obtener mayores ganancias, y los empleados generalmente están en una posición demasiado débil para decir no", explicó Qiao Zhian, profesor de psicología administrativa en la Universidad Normal de Beijing, al Morning Post.

"La mente humana no debería explotarse con fines de lucro", concluye Zhian.

Ahora los sensores podrían llegar a los pilotos de aviones. “Si las autoridades deciden llevar el dispositivo a la cabina, no creo que se puedan detener. Eso significa que los pilotos pueden necesitar sacrificar parte de su privacidad por el bien de la seguridad pública”, dijo Zheng Xingwu, profesor de gestión en la Universidad de Aviación Civil de China.

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