El declive de Elon Musk: "Lo peor aun está por llegar"

Elon Musk no pasa por su mejor momento.

Primero, algo de perspectiva: el jefe de Tesla es un tipo blanco privilegiado, un multimillonario representante del poder capitalista y tecnológico de Silicon Valley por lo que es probable que incluso en su peor momento sea infinitamente más afortunado que la mayoría de los mortales. Pero la masculinidad tóxica y la presión que esta impone por el éxito a toda costa han llamado a su puerta.

En una emotiva entrevista en The New York Times, Musk ha asegurado que el último año ha sido de lo más enloquecedor en su vida profesional y que el estrés derivado de ello ha provocado serios daños en su salud.

Las presiones del trabajo han hecho que hasta pasase el día de su cumpleaños dentro de la fábrica de Tesla y que incluso estuviese a punto de perderse la boda de su hermano Kimbal. “Este año pasado ha sido el más difícil y doloroso de toda mi carrera”, aseguró en la entrevista.

Tesla anunció un récord de pérdidas netas de 709,6 millones de dólares en un momento en el que intenta obtener rentabilidad de su Model-3, llamado a copar el mercado de forma masiva, algo que no ha sucedido.

Musk, según reconoce, se ha pasado trabajando alrededor de 120 horas a la semana, lo que ha derivado en un deterioro de su salud que ha hecho saltar las alarmas de su entorno más cercano. Según parece, Musk llegaba a permanecer dentro de la fábrica de Tesla hasta 3 ó 4 días seguidos.

Aunque Musk ha señalado en gran medida a su carrera profesional como la razón de su elevado estrés, este se ha visto agravado por una caída sin paliativos desde el pedestal del mundo tecnológico hacia la imagen de un multimillonario excéntrico y cuestionado.

Una concatenación de apariciones públicas extrañas y de actitudes en las redes sociales han hecho que muchos se pregunten sobre su estado. Estas son algunas otras razones por las que el CEO de Tesla probablemente esté sintiendo esta fuerte tensión en su vida cotidiana, ahora bajo escrutinio:

Llamó “pedo” a un submarinista que colaboró en el rescate de los 12 niños atrapados en una cueva de Tailandia

Cuando Musk usó el término “pedo” se refería a “pedófilo”. En una discusión en Twitter sobre su intención de usar un submarino Tesla en el rescate, Musk atacó al buzo Vernon Unsworth y sugirió que este se sentía atraído por los niños. “Es el tipo de expatriado británico que vive en Tailandia”, tuiteó Musk. “Reto a este tipo a mostrar el vídeo final del rescate. ¿Sabes qué? Mejor no te molestes en mostrar el vídeo, escribió en otro tuit antes de responderse. “Lo siento, pedófilo, realmente lo estabas pidiendo”. Como era de esperar, Unsworth amenazó con demandar a Musk por tales calificativos.

Esa rara aparición en la alfombra roja al lado de Grimes

Si te suena Grimes, sabrás que fue una exgótica y grunge que llegó a tener seguidores como si se tratase de una secta. Pero después de aparecer en la alfombra roja de la Met Gala al lado de Musk, su aura cool se desvaneció en un segundo. Con caras de absoluta sorpresa, los asistentes a la Met Gala se debieron preguntar si lo que estaban presenciando era cierto. Y sí, lo es: Grimes está con Elon Musk, y parece que la relación va viento en popa.

Azealia Banks se enzarza con Musk y con Grimes

Azealia Banks, Elon Musk y Grimes tuvieron recientemente un fin de semana de lo más curioso. Banks dijo en Instagram que había estado en casa del magnate sola durante días y que no pensaba marcharse hasta que Grimes llegase y terminase una canción para su nuevo álbum, Fantasea II: The Second Wave. Banks ha llegado a asegurar que estuvo en la casa CEO de Tesla en Los Ángeles esperando a que viniera Grimes para completar la grabación. Aseguró que la pareja no le dejó venir con su novio y por ello los señaló por sugerir un trío con ella. Además, en sus historias de Instagram, Banks acusa a Grimes de haberle hecho “ghosting” (haberla ignorado): “Esperé todo el fin de semana mientras Grimes mimaba a su novio por ser tan estúpido de no saber que no hay que postear en Twitter colocado de ácido. Banks también dijo que a Musk le hubiese salido mejor contratar una prostituta como acompañante de la Met Gala que no ir con Grimes, a quien acudió, según Banks, porque no tenía a nadie con quien ir ni esconder su “pequeña polla” de Amber Heard. La rapera también acusó al empresario de tomar esteroides y de hacerse implantes capilares para convencerse a sí mismo de que es un 'macho alfa'.

Aseguró que el hecho de que le llamen millonario es un intento de la prensa para desprestigiar a su persona

“La etiqueta de millonario usada por los medios, casi siempre está destinada a devaluar y a denigrar a el sujeto a quien se le aplica”, tuiteó Musk. “No me llamaron eso hasta que mis compañías alcanzaron una dimensión considerable, pero la realidad es que todavía hago el mismo trabajo científico y de ingeniería que hacía antes”. Con declaraciones así, absolutamente nadie podría sentir pena por él.

Habría quebrantado la ley al asegurar que Tesla podría pasar de ser una compañía pública en bolsa a ser una compañía privada

Musk también tuiteó que quería convertir Tesla, una empresa con oferta pública de acciones, en una compañía con títulos privados, asegurando que el financiamiento estaría asegurado. Sin embargo, algunos abogados han advertido que su anuncio puede haber quebrantado el artículo 14e-8 de la Securities Exchange Act de 1934,la cual prohíbe a las empresas que cotizan en bolsa anunciar planes para comprar o vender valores bajo algunas circunstancias que, en el caso de Musk, se habrían dado. La semana anterior, Musk fue demandado por algunos inversores y el máximo organismo de control financiero de EEUU habría iniciado asimismo una investigación.

Es cercano a Donald Trump

Musk ha sido uno de los principales donantes de un comité de acción política del Partido Republicano. Sin embargo, nuevamente a través de Twitter, el empresario ha querido desmentir su vinculación con el partido conservador, aclarando que apenas donó 40,000 dólares para Protect the House, una iniciativa para 'mantener el diálogo. Asimismo aseguró que no era conservador. A pesar de esto, su vinculación con Donald Trump ha sido muy estrecha. Musk fue asesor económico del presidente, aunque posteriormente rompiera la colaboración, según él, por no compartir su visión sobre el cambio climático.