PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo Trabajadores de Google protestan para no entrar "en el negocio de la guerra" del Pentágono Now

Now

Trabajadores de Google protestan para no entrar "en el negocio de la guerra" del Pentágono

H

Getty
 

Cerca de 3.000 empleados envían una carta al CEO, Sundar Pichai, para cancelar el proyecto que desarrolla inteligencia artificial para el Ejército de EEUU

PlayGround

05 Abril 2018 16:31

Los empleados de Google están en protestando para que la compañía no entre “en el negocio de la guerra”. Cerca de 3.000 trabajadores, de los 70.000 en total, han enviado una carta al actual CEO, Sundar Pichai, para que cancele el Proyecto Maven.

Recientemente, Google entró a participar en este programa del Pentágono dedicado a desarrollar una inteligencia artificial en los drones para detectar vehículos y otros objetos y seguir sus movimientos.

Aunque la compañía aseguró a los trabajadores que la participación no se centra en desarrollar tecnología directa de combate, los ingenieros se oponen a facilitar cualquier inteligencia artificial a los militares que pueda servir para ese fin. “Una vez que es entregado podría ser utilizado fácilmente para ayudar en estas tareas [hacer volar aviones no tripulados o lanzar armas]”.

Los googlers están preocupados por la imagen que proyectará la empresa en un momento en que la ciudadanía teme la creación de robots asesinos en las guerras. A los empleados no les sirve el argumento de que otros gigantes, como Microsoft y Amazon, colaboran con el Departamento de Defensa.

“Pedimos que se cancele el Proyecto Maven y que Google redacte, publique y aplique una política clara que establezca que ni Google ni sus contratistas construirán nunca una tecnología de guerra”, escriben los firmantes.

El miedo a que proliferen las armas autónomas se respira, y no solo dentro de Google. Diferentes investigadores de inteligencia artificial de casi 30 países han comenzado un boicot al Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea del Sur (KAIST) por aceptar crear un robot asesino para Hanwha Systems, empresa cuestionada por fabricar municiones prohibidas en 120 países. No están entre estos países EEUU, Rusia ni China.

“Hay un montón de cosas fantásticas que se pueden hacer con la inteligencia artificial que salvan vidas, incluso en un contexto militar, pero declarar abiertamente que el objetivo es desarrollar armas autónomas y tener un socio como éste despierta gran preocupación. Esta es una universidad muy respetada asociándose con un aliado con una ética muy dudosa que continúa violando normativas internacionales”, escriben en una carta los investigadores internacionales liderados por Toby Walsh, de la Universidad de Nueva Gales del Sur.

El boicot consiste en no colaborar con el Instituto.

Dentro de una semana habrá una reunión de Naciones Unidas en Ginebra para debatir sobre las armas autónomas. Solo poco más de 20 países han solicitado la prohibición total de los robots asesinos. ¿El resto?

share