Secuestro masivo de estudiantes en Camerún. Un grupo de de 79 estudiantes y 2 profesores fueron secuestrados este lunes en una escuela presbiteriana de Bamenda, capital de la región del noroeste de Camerún y una de las zonas en conflicto del país desde el pasado 1 de octubre de 2017. Ese día, esta y otras regiones anglófonas declararon unilateralmente la República independiente de Ambazonia. Según han informado las autoridades, ningún grupo ha reivindicado de manera oficial el secuestro pero se está llevando a cabo una búsqueda masiva en la que está involucrado el Ejército.
Los estudiantes secuestrados tenían entre 11 y 17 años y se encuentran en paradero desconocido. “A pesar de lo que sucedió, el estado, el gobierno no se rendirá. Vamos a asegurarnos de que los estudiantes y las personas secuestradas regresen a las aulas. Los hombres de seguridad están tomando medidas en ese sentido”, declaraba a AP, Lele Lafrique Deben Tchoffo Adolphe, Gobernador Regional del Noroeste.
En las últimas horas, un vídeo en el que supuestamente aparecen algunos de los estudiantes secuestrados ha emergido en redes sociales. El clip, que no ha sido verificado de manera independiente, ha sido subido a internet por un grupo autodenominado “Chicos Amba”, en referencia a la República independiente de Ambazonia. "Queremos irnos a casa, ya no queremos ir a la escuela", se escucha en la grabación. Los secuestradores mantienen que solo liberarán a los estudiantes si se consigue la creación de un Estado independiente en la región .
Un grupo de de 79 estudiantes y 2 profesores fueron secuestrados el lunes en una escuela presbiteriana de Bamenda, capital de la región del noroeste de Camerún y una de las zonas en conflicto del país desde que el pasado 1 de octubre de 2017
El secuestro de los estudiantes y sus profesores es una muestra más de la tensión que vive esta zona del país y que se remonta a 2016. Camerún es un país con dos lenguas cooficiales (inglés y francés) que hace dos años vivió varias jornadas de manifestaciones pacíficas de profesores y abogados anglófonos que demandaban un uso más igualitario del inglés en tribunales y centros educativos en las regiones de habla inglesa del Noroeste y Sudoeste. Estas protestas fueron duramente reprimidas y degeneraron en grupos armados y combates. Las estimaciones apuntan a que desde el inicio de la crisis 500 personas han muerto y se han producido 200.000 desplazados.