La revista GQ ha anunciado que el quarterback Colin Kaepernick ha sido nombrado Ciudadano del Año por el impacto que ha tenido su protesta contra el himno de los EEUU y su compromiso con la lucha contra la discriminación racial.
Esta distinción de la publicación estadounidense le convertirá en una de las portadas a nivel mundial durante el mes de diciembre. Para él es todo un honor:
Fue en el verano de 2016 cuando Kaepernick comenzó una serie de protestas por la violencia de la policía hacía las minorías en EEUU. Algo que empezó siendo un acto puntual en medio de la NFL en el que un jugador se arrodillaba contra el himno, se ha convertido en un icono de resistencia social: decenas de jugadores han apoyado la causa, generando un enfrentamiento directo de la liga contra Donald Trump.
El presidente americano incluso ha llegado a pedir a la liga que prohiba este gesto y que expulse a los que no respeten el himno.
Lejos de conseguirlo, la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color cogió como referencia la protesta de Kaepernick para solicitar al Congreso que "The Star-Spangled Banner" deje de ser la marcha nacional del país por sus estrofas racistas, tal y como te contamos aquí.
Aunque hayan hecho oídos sordos a las peticiones de Trump, la NFL ha marginado a Kaepernick. Desde que salió de los 49ers de San Francisco durante el pasado mes de marzo ningún equipo le ha ofrecido un contrato, siendo un jugador más que aprovechable para muchas franquicias. Estas sospechas le llevaron a demandar a la liga y a los dueños de los equipos por confabularse contra su persona.
En el nuevo número de GQ también hay un reportaje sobre el jugador titulado "Colin Kaepernick no será silenciado", aunque no aparece ninguna cita suya.
Desde que no está en la NFL no ha hecho ninguna declaración pública, una estrategia para conseguir relevancia mediática a través de su silencio. Sin embargo, desde GQ aseguran que Kaepernick aceptó participar en su proyecto porque "Colin Kaepernick no será silenciado".
Gran parte del artículo consiste en aproximaciones a la figura de Kaepernick basadas en declaraciones de "sus confidentes más cercanos", o así lo define la revista, aunque lo mejor del reportaje puede que sean sus imágenes recibiendo el apoyo de los jóvenes de Harlem.
Todos ellos siguen contagiados del espíritu combativo del nuevo Ciudadano del Año.
