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Los penaltis han dado para horas y más horas de debate en las barras de bar, análisis en los grandes medios e infames imitaciones de las carrerillas de los futbolistas.
Siempre se ha pensado que es una de las acciones más sencillas de ejecutar en el fútbol, como si chutar uno significara que acaba en gol sí o sí. En los últimos años el rey del penalti ha sido Cristiano Ronaldo -o "Penaldo" para sus críticos-, mostrándose prácticamente infalible desde los 11 metros.
Aparentemente lanzar un penalti es buena colocación, potencia y saber jugar con los movimientos del portero de turno, pero Ronaldo tiene un as guardado de bajo de la manga.
Ayer lo sacó a relucir en el 1-1 que le metió a Areola desde el punto de penalti y no te diste ni cuenta...
Justo después de que el árbitro italiano Gianluca Rocchi pitara un penalti a favor del Real Madrid en el tramo final de la primera parte, el portugués cogió el balón, lo colocó con mimo y lo plantó en el césped.
Nada nuevo bajo el sol, pero en las repeticiones que iban emitiendo las cadenas de televisión hubo quien se percató de algo nunca visto... la pelota se elevó antes de que CR7 la golpeara, sin que llegara ni siquiera a rozarla.
¿Magia? No llega a tanto, pero es un trucazo.
Resulta que Ronaldo clavó con tanta fuerza la pierna de apoyo en el césped que hizo que vibrara la superficie, consiguiendo que el balón alcanzara esa pequeña pero relevante altura para que pudiera empalar el balón mucho mejor.
Rio Ferdinand, ex compañero de Cristiano Ronaldo en el Manchester United, fue el encargado de explicar el fenómeno. No es una mera casualidad: Ronaldo practica esta técnica. "Es de locos. Esto solía hacerlo en los entrenamientos, te lo juro”, comentó Ferdinand sobre el penalti.
En primera instancia los aficionados creían que el portugués le había dado un pequeño toque al balón antes de disparar, lo que invalidaría la jugada, pero nada más lejos de realidad.
No obstante, si algun árbitro se pone estricto podría hacer que se repitiera el penalti, ya que la normativa dice que el balón debe estar quieto antes del golpeo.
El problema es que Ronaldo no toca en ningún momento el esférico, así que se trata de una acción difícil de valorar. Sea como sea, la ambición de la estrella del Real Madrid le ha llevado a encontrar vacíos legales que hasta ahora nadie había explorado en el fútbol.
