Piden dos años de cárcel para los culpables del último amaño (conocido) del fútbol español

Han pasado ya casi 7 años del mayor escándalo reciente del fútbol español. Aquel Levante-Zaragoza de 2011 siempre estuvo en el candelero por haber sido un partido amañado y ahora la Fiscalía pide 2 años de cárcel y 6 sin poder jugar, entrenar o tener relación con el fútbol a los 36 jugadores que presuntamente pactaron el resultado, tal y como ha adelantado el diario Marca.

Ha sido la Audiencia Provincial la encargada de reabrir el caso el pasado mes de enero y ha marcado las directrices para que el caso vaya ahora al Juzgado de lo Penal.

¿QUÉ PASO EXACTAMENTE EN 2011?

Era la última jornada del curso 2010/11, jugada el 21 de mayo de 2011. El Real Zaragoza visitaba al Levante en Valencia jugándose la vida: si ganaba tenía muchos números de mantener la categoría.

En efecto, la victoria por 1-2 junto a la derrota del Deportivo de La Coruña ante el Valencia significó la continuidad en Primera División del equipo maño. A los pocos meses se inició una investigación por parte de la Fiscalía Anticorrupción, motivada por las acusaciones de amaño por parte de La Liga y el Deportivo, que acabó descendiendo.

Según dictaba la investigación, el Zaragoza habría ordenado a través de su entonces presidente, Agapito Iglesias, y del director financiero de la entidad, Javier Porquera, el ingreso de la cantidad de 965.000 euros a las cuentas bancarias del director deportivo Antonio Prieto, el entrenador mexicano Javier Aguirre y 9 jugadores del club: Maurizio Lanzaro, Ander Herrera -ahora en el Manchester United-, Antonio Doblas, Paulo da Silva, Braulio Nóbrega, Leonardo Ponzio, Gabi Fernández -capitán del Atlético de Madrid-, Jorge López y Carlos Diogo.

Los dirigentes y los capitanes habrían acordado entregar ese dinero a los jugadores del Levante para que se dejaran ganar.

Lógicamente, esta cantidad es díficil de controlar, pero para los investigadores resultó demasiado llamativo que los jugadores de aquella plantilla del Levante tuvieran unas vacaciones sospechosamente baratas. Tras el verano solicitaron a Hacienda el informe de los gastos que habían tenido en sus cuentas la temporada anterior y las diferencias entre un año y otro eran abismales... mientras que en 2011 -con el presunto dinero negro del amaño- no llegaron a sacar más de 7.000 euros en sus cuentas, en la anterior había gastos de más de 200.000 en hasta tres futbolistas como Munúa, Caicedo y Jefferson Montero.

Llama especialmente la atención el caso de Rubén Suárez, que no llegó a sacar ni un euro de su cuenta en el verano de 2011.

¿QUIÉNES SON LOS ACUSADOS?

La Fiscalía ha pedido la condena de 2 años de cárcel y 6 de inhabilitación para los 36 jugadores convocados para ese partido, sin distinción.

Javier Aguirre y Antonio Prieto también han recibido la misma acusación que los futbolistas, mientras que los dirigentes Agapito Iglesias, Porquera y Javier Checa se enfrentan a una condena mayor dado que les acusarán de falsedad en documento mercantil.

¿QUÉ LES PUEDE PASAR?

Teniendo en cuenta que la decisión fiscal ha sido la de acusar a todos los jugadores por igual, citando el concepto de coautoría, llegarán todos al juicio en igualdad de condiciones.

La pena que solicitan es de 2 años, así que en condiciones normales y sin más delitos de la misma naturaleza es casi imposible que ninguno de los jugadores termine en prisión.

Deberían estar preocupados por los 6 años de inhabilitación, ya que sería una condena válida para cualquier actividad relacionada con el fútbol en cualquier país. Al ser una petición judicial sería muy difícil de eludir para todos, aunque sí es factible que logren aplazar su posible aplicación durante un tiempo interponiendo recursos y recurriendo a instancias.

En caso de que el juicio se celebre en un espacio corto de tiempo, Ander Herrera podría quedarse sin disputar el Mundial'18 de Rusia este mismo verano. Quizá sea el que tiene más a perder junto a Stuani -juega actualmente en el Girona-, Caicedo -Lazio- y Vicente Iborra -Leicester City-.