Se trata de una de las especies en peligro de extinción más desprotegidas, pero eso no disuadió a este submarinista de asediarlo de esta manera
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Quizá no lo sabías, pero los tiburones ballena son una de las especies en extinción que más están sufriendo durante los últimos años. El último ejemplo es este vídeo en el que vemos cómo un buceador ‘galopa’ sobre la espalda de uno de estos tiburones mientras el resto de sus compañeros lo registran todo con una cámara acuática.
Los hechos tuvieron lugar en la bahía de Cenderawasih, en Bali, a principios del mes de agosto, y por supuesto han traído consecuencias para los submarinistas, quienes fueron denunciados por un grupo de activistas por el medio ambiente.
El protagonista de ese galope, que ha resultó ser un empresario local, ha sido detenido y tendrá que enfrentar cargos por su “hazaña”.
Según parece, el tiburón ballena es un animal especialmente débil por varios motivos. Para empezar, sus movimientos lentos hacen que sea una presa especialmente fácil para los cazadores furtivos. Además, sufren especialmente los accidentes con barcos de pesca por el mismo motivo. Por eso las leyes marinas del país son especialmente preventivas a la hora de acercarse a ellos.
No es para menos. Según los últimos registros de la llamada Lista Roja de la Unión Internacional de la Conservación de la Naturaleza (la lista que registra los animales en peligro de extinción), tanto el tiburón ballena como el tiburón martillo son dos de las especies que han dado un mayor salto en tan terrible lista, habiendo menguado su población en más de un 50 por ciento en solo cuatro décadas en países como Índia o Indonesia.
“Es alarmante ver tales especies emblemáticas en carrera hacia la extinción”, declaró recientemente Jane Smart, la directora del Programa Mundial de Especies de la UICN, en un comunicado. “Estas nuevas evaluaciones de la Lista Roja de la UICN hacen hincapié en la urgencia de que la comunidad de conservación actúe estratégicamente para proteger la increíble diversidad de la vida en nuestro planeta. Los océanos y los bosques del mundo solo seguirán proporcionándonos alimentos y otros beneficios si preservamos su capacidad para hacerlo”.
El reto para los gobiernos está ahora en dar con políticas y medidas de protección que sean efectivamente capaces de regular una situación que es cada vez peor para nuestros océanos y quienes habitan en ellos.