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Nunca se dan suficientes besos. Nunca son demasiadas las muestras de afecto a aquellos a quienes queremos. Nos lo recuerdan estos dos entrañables amigos que no escatiman en muestras de cariño el uno hacia el otro. Un perro y un caballo que han robado la atención —y el corazón— de miles de usuarios en las redes sociales.
La escena fue grabada en un establo de Florida (EEUU) y según sus responsables no se trata de un hecho puntual. Ese caballo y ese pitbull tienen una relación especial y no se avergüenzan a la hora de mostrar su afecto. Se buscan e intercambian mimos. Practican casi a diario un ritual digno de ver; interactúan saludándose, se mordisquean y se lamen mutuamente, con un respeto donde ellos han marcado el limite.
Ambos animales se quieren sin barreras. Como si fuese algo habitual entre sus especies. .Y eso que dicen que ese tipo de perros son poco cariñosos...
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En realidad estas muestras de afecto no deberían extrañar si tenemos en cuenta la especial relación que desde siempre han tenido perros y caballos, convirtiéndoles en los mejores amigos de la granja. Dicen algunos expertos que su buen entendimiento puede tener que ver con el pasado de algunas razas como acompañantes de los carruajes de la alta sociedad.
Una cariñosa relación
Puede que al principio se muestren temerosos. Cuando un caballo y un perro se encuentran por primera vez, el perro tiene tendencia a ladrar porque es un ser desconocido. No pasa nada. Necesitan tiempo.
El acercamiento será promovido por la curiosidad que ambos se despierten entre sí. Una vez establecida una primera aproximación y ya en confianza, ambos animales establecerán los límites de su amistosa y cariñosa relación. Una relación en la que, en la mayoría de los casos, el caballo se erigirá en defensor y protector de su ladrador amigo.
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