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Los expertos aseguran que los golden retriever son perros obedientes, adiestrables, tranquilos, ágiles... pero ¿buceadores? Resulta que algunos sí.
Jill es un perrito de esta raza al que no se le resisten las profundidades acuáticas cuando desea algo. El que la sigue la consigue, que dice el saber popular. Y Así que Jill se sumerge una, dos veces, hasta conseguir sacar un ladrillo del fondo que transporta feliz en su boca. Su energía y habilidad han enamorado a Instagram.
Jill se mueve como pez bajo el agua, pero ¿hubiera pasado lo mismo si fuera un Yorkshire? Probablemente no. Los perros nos llevan ventaja en el medio acuático y es que saben nadar instintivamente. Sin embargo, no verás a ciertas razas zambullirse.
El perro de agua español es capaz de sumergirse varios metros y los terranova se utilizan para la pesca y las labores de rescate. Los golden retriever también demuestran esta capacidad, más que nada porque su cabezonería les lleva a perseguir objetos hasta la extenuación, dentro o fuera del agua. Jill quería su ladrillo y no paró hasta conseguirlo, haciendo gala de los atributos de su raza.
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¿Cómo se sabe si tu perro puede aprender a bucear? Lo primero, lo más obvio, es preguntarse ¿le gusta nadar? No todos valen para todo y hay que respetar que muchos no puedan hacerlo. Un bulldog es complicado que se zambulla y se mueva en este entorno con facilidad, no es cuestión de presionarles.
El entorno es primordial, como en todas las nuevas experiencias. Nuestro amigo debe encontrarse cómodo o no conseguiremos nuestro objetivo. Se debe valorar si el sitio es seguro. Tener en cuenta los obstáculos que puede encontrar, conocer la profundidad, el suelo y la calidad del agua evitará cualquier susto. Lo mejor son aguas calmadas y tranquilas, sin mucho movimiento, como una piscina o un lago. Es importante también que puedan ver, que sean claras y lo bastante profundas como para que puedan hundirse. En ningún caso se le debe obligar si no quiere o está asustado.
Si tu perro es de los que se encuentran como pez en el agua, entonces llega el adiestramiento. Si es de los que persiguen objetos, utilizar pelotas de colores llamativos que se hundan es muy útil, pero no intentes que un husky te traiga una pelota en el agua. Tampoco fuera de ella. Los labradores, los golden, los perros de agua, los pastores sí son razas que pueden llegar a bucear. Y si finalmente el adiestrarlo no funciona, al menos habrás pasado un precioso tiempo al aire libre con tu amigo, que seguro que lo agradecerá.
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