Hasta ahora, lo mejor que había salido de la edición de este año del Festival de Cannes eran las miraditas de “Mira, tía, estás cañón” entre Kristen Stewart y Cate Blanchett. ¿Qué más le podíamos pedir a un festival tan clásico y estirado como este que un momentazo bollo sin complejos?
Pero no ha sido su único gesto para hacer frente al machismo del festival. Después de que Blanchett se quejara públicamente de la falta de representación femenina en el festival — 3 directoras mujeres frente a 17 hombres — Stewart ha rematado su pequeña batalla descalzándose en mitad de la alfombra roja.
Kristen y su batalla con Trump:
Porque, aunque esto suene a 1942, en Cannes sigue siendo una normativa actual: las mujeres han de acudir con tacón alto. Prohibidos los zapatos planos.
¿A lo mejor se les olvidó especificar que no se puede ir descalza? Quien hace la ley hace la trampa.
A parte de lo retrógrado y sexista que resulta obligar a las actrices a llevar un calzado determinado — que, por cierto, es terriblemente incómodo — mantener una norma tan absurda cuando está jarreando y el riesgo de resbalar y abrirse la cabeza se multiplica un 300% con tacones de aguja manda narices.
Esta no es la primera vez que Stewart se planta con el tema de la imposición de los tacones. En 2016 se cambió unos stilettos plateados por unas zapatillas en pleno photocall, sacando el dedo anular dejando clara la opinión que tenía al respecto.
Una semana antes, habló con la prensa sobre las políticas sexistas de Cannes, “Las cosas tienen que cambiar inmediatamente. Se ha vuelto muy obvio que si un hombre y yo estuviéramos caminando juntos por la alfombra roja y alguien me parase y me dijera, ‘Disculpe, señorita, no está llevando tacones, no puede pasar’. Entonces yo simplemente le diría, ‘Mi amigo tampoco los lleva. ¿Él no tiene que llevar tacones?’. Puede funcionar en ambos sentidos. Simplemente no puedes pedirme que haga algo si no se lo estás pidiendo a él”.
Stewart no ha sido la única actriz en protestar por el sí-o-sí de los tacones en Cannes, en 2015 la actriz Emily Blunt dejó claro que estaba harta de que le dijeran qué tiene que llevar. “Creo que todo el mundo debería llevar calzado plano, la verdad”, le dijo a una periodista. “No deberíamos llevar más tacones altos. Ese es mi punto de vista. Prefiero llevar zapatillas Converse”.
[Vía Elle]
