‘Skam España’ hará que entiendas a esa generación que creías perdida en Instagram

Objetivo: Hacer que los adolescentes regresen a la televisión. Esto es lo que se propuso la serie noruega Skam mientras estuvo en pantalla desde 2015 hasta 2017. La ficción consiguió su propósito, ya que se hizo viral, cuenta con versiones en Francia, Alemania, EE.UU., Italia y Holanda y tuvo a las nuevas generaciones de espectadores pendientes durante cuatro temporadas de la vida de todos los personajes. Hace poco han comenzado las emisiones de Skam España en Movistar+ y todo apunta a que se repetirá el éxito del serial escandinavo.

La adaptación española no es una réplica exacta del show original -algo que sí han hecho nuestros vecinos galos-, sino que ha amoldado los problemas, preocupaciones y ambiciones del grupo de jóvenes protagonistas a la realidad de un adolescente de Madrid. Así, en los primeros clips disponibles hemos escuchado referencias a Bachillerato, al hit veraniego Yo ya no quiero ná de Lola Índigo (exconcursante del triunfante OT 2017, que arrasó en target juvenil), al ansiado viaje de fin de curso a Mallorca por el que todos hemos pasado, expresiones cotidianas como “mazo gracioso” y referencias a la pizza cuatro quesos de Casa Tarradellas, que de tantas resacas nos ha salvado.

Justamente esta es la clave del éxito de Skam (que al castellano se traduce como “vergüenza”): saber conectar con los jóvenes y retratar su cotidianidad de una forma fiel y natural, sin artificios ni hipérboles típicas de Gossip Girl o Física o Química que alejan al público teen de su realidad en lugar de acercarlo. Al igual que ocurre en la ficción madre, cada temporada de Skam España se centrará en la vida de un personaje, y en esta primera tanda de episodios, el foco caerá sobre Eva (Alba Planas), una chica de 16 años con pocas amigas y que mantiene una relación con Jorge (Tomy Aguilera).

Eva y Jorge en 'Skam España'. / Movistar +.

Instagram como herramienta para construir el relato

Antes que nada, Skam es una serie transmedia y fragmentada que se puede seguir a tiempo real. Con Skam no hace falta esperar todos los domingos a las 21:30 horas para ver el nuevo episodio, sino que sin previo aviso se publican en la web oficial clips de vídeo a la misma hora y en el mismo día en el que los hechos tienen lugar en la ficción. Así, si Eva charla con Lara un lunes a las 11:36 horas, entonces ese vídeo verá la luz. ¿Qué se genera con eso? Un debate constante entre el público jóvenes que se traslada a su hábitat natural: las redes sociales.

Para ser directos, Skam mola porque lo puedes seguir por Instagram. En un momento en el que la generación Z y los millennials pasan más que nunca de estar pendientes de lo que echan en la televisión y de toda forma de consumo que huela a vieja escuela, Skam ha decidido acabar con ese atronador ruido para atacar directamente en el entorno digital donde están los jóvenes.

Los personajes de Skam España (Eva, Jorge, Lucas, Inés, Lara) tienen cuentas de Instagram, donde publican fotos y stories. El público los puede seguir, darles likes y comentarles como si fueran personas reales, algo que ayuda indudablemente a que empaticen con ellos y se reconozcan en ellos. Así, aparte de los clips casi diarios que se lanzan, el público puede complementar la visión de los hechos y, sobre todo, meterse en la vida de los Eva y cía gracias a sus perfiles en redes.

Lo mismo sucede con las conversaciones de Whatsapp que se hacen indispensables para entender cómo avanza la trama y cómo cambian las relaciones entre los jóvenes. Los personajes están conectados al móvil todo el tiempo y lo que sucede detrás de la pantalla es tan determinante como una acción cara a cara. Realidad y ficción se han combinado en Skam para ofrecer el retrato más intimista y acertado de lo que supone ser adolescente actualmente.

Vínculo real entre personajes y audiencia

“Queríamos que el show fuese útil para la audiencia”, explicó la jefa de programa en la televisión noruega (NRK), Marianne Furevold. Claramente lo ha sido y con Skam España lo más seguro es que lo seguirá siendo. Gracias a la magnífica tercera temporada con la que encontró la fama a nivel internacional, muchos jóvenes decidieron salir del armario frente a sus padres y amigos (dentro spoiler) inspirados por Isak (fuera spoiler). Ese poder se debe a que Skam plasma las inquietudes de los adolescentes de tal forma que se pueden ver reflejados: sexo, racismo, conflictos entre religiones y culturas, acoso, salud mental, homosexualidad, soledad, cosificación de la mujer…

Skam no da lecciones cargadas de moralina ni tampoco juzga ni critica, simplemente expone la realidad juvenil de una forma intimista casi documental que propicia una interconexión entre la audiencia.

¿Conseguirá Skam España lo mismo que sus predecesoras? Aún no los sabemos pero lo más probable es que sí: ya existen varias cuentas de fans creadas en Twitter dedicadas a la ficción e incluso se han creado grupos de Whatsapp para comentarla. El impacto social ya ha empezado, ahora falta ver si Eva, Nora, Lucas y Amira no se quedan en un "copia y pega" más de sus homólogos (y casi homónimos) noruegos Eva, Noora, Isak y Sana; y, sobre todo, que también consigan ganarnos el corazón.