Gracias a la juez Colleen Kollar-Kotelly, ningún soldado transgénero será expulsado del Ejército estadounidense
Una jueza federal de Washington, Colleen Kollar-Kotelly, se atrevió ayer a propinar el último golpe judicial contra la administración de Donald Trump. Bloqueó parcialmente el veto a personas transgénero en las Fuerzas Armadas de Estados Unidos al prohibir al Gobierno a expulsarles y no dejarles acceder a sus filas.
Se trata de la respuesta a una denuncia formulada por múltiples soldados que han estado a punto de ver como sus vidas y sus carreras profesionales se torcían por completo. Pero gracias a Kollar-Kotelly, la ley que aprobó Trump en agosto y que en prinicipio entrará en vigor a partir del 23 de marzo de 2018, es ahora más endeble que nunca.
En julio, el mandatario expresó a través de un tuit que quería cerrar las puertas del ejército a las personas transgénero porque, en su opinión, su presencia debilitaba a las tropas. Y para lanzar este veredicto, Kollar-Kotelly no hizo más que regirse por el sentido común. Como escribió en un documento de 76 páginas, los argumentos del presidente de EEUU para implantar esta política “no parecen estar respaldados por ningún hecho”. Además, añadió que el procedimiento que se llevó a cabo para materializar la directriz está plagado de injusticias: “los derechos de una clase de individuos han sido revocados de forma sumaria y abrupta por no entrar en los estandares de los únicos estudios disponibles en ese momento".
Miles de personas protestas en Times Square después de que Trump expresara su decisión en julio / Getty
Aunque suenen los aplausos entre la comunidad LGTBI estadounidense, el trabajo para erradicar esta ley por completo debe continuar. La sentencia de la magistrada no consiguió acabar con la decisión del secretario de Defensa, Jim Mattis, de congelar la contratación de personas transgénero hasta enero de 2018. Tampoco levantó el bloqueo de fondos destinados a cirugías porque consideró que ninguno de los demandantes se había visto afectado por ello.
Estas carencias no evitaron que la directora del Centro Nacional para los Derechos de las Lesbianas, Shannon Minter, calificara al fallo ante BuzzFeed News de “victoria absoluta”. Y como añadió a Associated Press (AP) "sus vidas (las de soldados transgénero) quedaron devastadas cuando Trump dijo en Twitter que pretendía restablecer la prohibición. Ahora pueden servir en igualdad de condiciones con todos los demás”.