Un meteorito que nadie vio venir explota sobre el cielo de Rusia

Un meteorito brillante estalló sobre el cielo de varias ciudades de Rusia esta semana, lo que provocó un fuerte resplandor. Una cámara cerca de la ciudad de Lipetsk, entre Moscú y la frontera con Ucrania, grabó a la secuencia de esta bola de fuego. Desde 2013, es la segunda vez que nadie ve venir uno hasta que explota en el país.

Afortunadamente, este meteorito no tiene la magnitud del que explotó hace cinco años, cuando un superbólido cruzó la atmósfera y cayó cerca de la ciudad rusa de Chelyabinsk dejando 1.500 heridos. La onda expansiva de ese estallido -que liberó una energía de 500 kilotones- reventó ventanas y causó daños en algunos edificios. En ese momento, se recuperaron cerca de 5.000 kilos de fragmentos del cuerpo celeste, incluida una pieza de 650 kilos intacta que se sacó en el lago Chebarkul.

En esta ocasión, no hubo heridos ni desperfectos. Por la explosión generada, la NASA calcula que el meteorito tenía apenas un tamaño de 4 metros de diámetro, un bebé si se compara con el de 20 metros de Chelyabinsk.

"El evento ha sido reportado por testigos de las ciudades de Kursk, Lipetsk, Voronzeh y Orel. Muchos de ellos informaron un fuerte estampido sónico", informa la Organización Internacional de Meteoros.

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La enorme roca no fue detectada hasta que entró en contacto con la atmósfera, donde se desintegró y se cree que ninguna pieza alcanzó el suelo. El impacto fue registrado por los sensores del gobierno de EEUU, utilizado para detectar explosiones nucleares, entre otras cosas.

Aunque no hubiera causado ninguna destrucción, la NASA está tratando de mejorar sus sistemas de detección para advertir de los intrusos que se cuelan por nuestra atmósfera y que nadie se lleve sorpresas.