Las estrellas de cine y televisión distan de ser perfectas. Todos lo sabemos. Durante décadas, los famosos bajo contrato por grandes estudios tenían a su disposición enormes departamentos de relaciones públicas cuya mayor inversión de tiempo consistía en ir lavando su imagen, ajustándola a todo criterio público de corrección generalista.
Si eran maltratadores, borrachos, violentos socialmente o meramente desconsiderados en el trato público, tras de él venían amables expertos (fixers) en solventar problemas. Por las buenas, preferiblemente, aunque podía llegar a ser por las malas, mediante chantajes u otras violencias. Hollywood está lleno de estas oscuras leyendas.
Aparte de estos “problemas de actitud” que debían permanecer ocultos y que incluían, por cierto, naturalezas sexuales que se desviaran de lo aceptable, que era la más estricta heterosexualidad, había otras actitudes que entonces no parecían tan vergonzantes pero que hoy son expuestas bajo otra óptica social.
Existía un conchabe entre varones del espectáculo para tratar con condescendía y superioridad a sus partenaires femeninas y a mantener un estatus diferencial en el que su sexualidad debía estar expuesta para la complacencia del varón: vestimenta, aspecto y actitud. Una estrella femenina podía verse obligada a soportar públicamente las bromas sexuales de sus compañeros varones, al menos en unos ciertos márgenes. El humor con doble sentido, o sea el famoso “sexual innuendo”, era el pan nuestro de cada día. Era un trágala, como diría Gordon Ramsey, que es nuestro protagonista de hoy.
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Ramsey es una de las estrellas de televisión más famosas de la última década en Gran Bretaña y Estados Unidos. Sus programas sobre cocina y su carismática personalidad -al menos bajo algunos preceptos- le otorgan una popularidad que a veces parece subírsele a la cabeza. Siempre ha estado rodeado de rumores acerca de sus relaciones extramaritales y este vídeo viene a ser una buena muestra de cómo se permite tratar a otras estrellas de televisión tanto o más famosas que él. Pero, claro, son mujeres y eso, bajo su óptica y comportamiento, parece excusa para arrogarse un plus.
En este clip de 2010, que se ha vuelto a viralizar ahora, vemos cómo Ramsey se dejó llevar por ese camino en el programa de entrevistas del célebre anfitrión de talk shows nocturnos Jay Leno. Y hay que decir que no sin cierta complicidad por parte del presentador y moderador nada moderado en este caso.
La entrevistada y más que paciente estrella femenina era Sofía Vergara, la mundialmente célebre protagonista de la telecomedia Modern Family. Una mujer indiscutiblemente atractiva, pero eso es algo que no es una carta blanca para recibir supuestos piropos, dobles sentidos de índole sexual e incluso alguna palmadita y roce a todas luces inadecuado.
Pretendidas bromas como "podrías noquearte a ti misma si corres", en referencia al volumen pectoral de Vergara. O "te la tragas toda", usando como excusa una foto en la que ella come pizza. O la que remata el presentador, "¿Cuánto peso has ganado?". Nadie pide que un programa de entrevistas nocturno sea pura Filosofía. Pero esto, no es.
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