PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo La titánica lucha de una polilla que escapa de la boca de una rana cuando está siendo engullida Content

Content

La titánica lucha de una polilla que escapa de la boca de una rana cuando está siendo engullida

H

 

Consigue escapar de una muerte que parecía segura

Playground community

19 Septiembre 2018 15:27

PlayGround quiere impulsar el cambio. Con ese objetivo, desde PlayGroundDO nos hemos propuesto facilitarte el acceso a proyectos y acciones de impacto social que son de nuestro interés, y creemos que también del tuyo. Acciones a las que puedes sumarte desde tu propio teléfono. Solo tienes que hacer clic sobre el botón rojo ‘DO’ que verás a lo largo del artículo.

¿Nos ayudas a cambiar las cosas?

La lucha por la supervivencia en la naturaleza puede ser fascinante, intensa y brutal. En el mundo salvaje sabemos que impera la ley del más fuerte: solo aquellos que son capaces de superar al resto sobreviven. Y esa lucha constante a veces nos deja sorpresas: el más fuerte no siempre es quien imaginamos.

El vídeo que encabeza estas líneas recoge una de estas situaciones. Una rana —a la que las personas responsables de las imágenes llaman “Hannibal”— trata de comerse a una enorme polilla. El insecto, por su parte, tiene sus propias ideas, y no se deja vencer tan fácilmente. Así comienza una lucha entre los dos animales que no es apta para aquellos con el estómago más delicado.

Vídeo relacionado:

Al principio solo ves a la rana. Tras un par de segundos entiendes que eso que asoma de su boca son dos alas de insecto. El animal parece estar reposando, pero cuando abre las mandíbulas vemos que algo empieza a moverse en su interior. Poco a poco, se empieza a vislumbrar la cabeza de una polilla que intenta escapar de una muerte que parecía segura.

Durante varios angustiosos segundos, podemos ver cada vez más partes del cuerpo de la enorme polilla, cuyo tamaño es casi idéntico al de la propia rana que había tratado de comérsela. Los propios autores del vídeo comentan que, aunque en un principio parecía que era el insecto el que tenía problemas, tras visualizar las imágenes varias veces llegaron a la conclusión de que el anfibio lo estaba pasando mucho peor en su esfuerzo por engullirla.

Vídeo relacionado:

share