Una niña llama “puto” repetidas veces al sacerdote que la está bautizando

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Ay, los bautizos... Esa tradición religiosa por la que supuestamente se libera a los niños del pecado original mojándoles la cabeza con agua bendita. Aunque para los padres cristianos es una ceremonia especial, para la mayoría de los pequeños suele ser algo aburrido e innecesario. A veces, incluso traumático.

En este vídeo, que se ha hecho viral en unas horas, tenemos el ejemplo claro de una niña que no está nada contenta con la celebración. Mientras su familia la sujeta boca arriba sobre la pila bautismal y el cura intenta echarle el agua por la cabeza, se la oye gritar: "¡Déjenme, déjenme! ¡Puto, puto!".

El sacerdote se lo toma a risa: “Ya me dijo palabras feas". Los padres, sin embargo, se muestran avergonzados y reprenden a la niña, que sigue mostrándose enfadada. Incluso le sueltan la mano a la cara. Al ver que no se calla, optan por cubrirle la boca con las manos para que el cura sumerja la cabeza de la niña en la pila bautismal, concluyendo la ceremonia.

Las imágenes han dividido las opiniones de los cibernautas en las redes sociales. Los unos aplauden la actitud rebelde de la menor. Los otros consideran que las palabrotas vienen del mal ejemplo que la niña recibe en casa.

Lo que hay que alabar, desde luego, es el buen humor del párroco, que no pierde la sonrisa ni la compostura en ningún momento. Una actitud muy diferente a la que han tenido otros sacerdotes en los últimos meses…

En junio, un sacerdote francés de 89 años fue grabado dándole una bofetada a un bebé después de perder la paciencia por los llantos de la criatura. Esta imperdonable forma de perder los papeles le costó el puesto, ya que fue suspendido de cualquier ceremonia de bautismo o matrimonio.

Unos meses antes, otro sacerdote, esta vez en Rumanía, también perdió los nervios en un bautizo. El pobre bebé no paraba de llorar y al hombre se le ocurrió taparle la boca para que se callase. No contento con eso, lo agarra como a un animal y lo sumerge de muy malas formas en la pila bautismal.

Los padres, obviamente, alucinaron con la actitud del cura, que fue suspendido por la iglesia rumana durante un mes.

Está claro que los llantos de un bebé pueden ser desquiciantes, pero conductas de ese estilo son imperdonables.

Para completar los vídeos de bautizos traumáticos, tenemos también el protagonizado por un cura chipriota que casi ahoga a un pequeño. Se ve cómo le agarra como a un muñeco y lo sumerge violentamente en la pila varias veces. En segundo plano hay un grupo de niñas presenciando la escena, que ponen cara de susto e incluso se echan hacia atrás.

Desde luego yo no descartaría que esa noche tuvieran pesadillas con la ceremonia.