PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.
Oh! Parece ser que estás usando adblocker y lo respetamos. Por eso podrás seguir disfrutando de nuestros contenidos sin problema pero quisiéramos pedirte que lo desactivaras para nuestro site. Ayúdanos a seguir adelante y a luchar por aquello en lo que creemos.
Suscríbete a las notificaciones de playground para no perderte nada
Estas subscrito! Recibirás las ultimas novedades
¿Quieres recibir las mejores noticias y vídeos de PlayGround ?
Aunque quizás su trabajo más conocido sea la saga Ocean's Eleven, el director Steven Soderbergh siempre ha tenido una filmografía paralela al cine mainstream: películas como The Girlfriend Experience o Full Frontal hacían que el realizador alternase los trabajos de gran presupuesto con otros más modestos, para no perder así sus raíces –Sexo, mentiras y cintas de vídeo, su ópera prima, es un título fundamental para entender el cine indie de los años noventa.
Ahora, quiere detener una de estas dos actividades: “No imagino un escenario en el que vuelva a trabajar para un estudio”, declaró el realizador en una reciente entrevista.
La última película de Soderbergh, Unsane, ha sido rodada íntegramente con un iPhone, no tanto por razones económicas, sino estéticas. “La gente olvida que te da una calidad de imagen en 4K”, recuerda el cineasta. “Puedes proyectar la película en una pantalla de cine enorme, y seguirá viéndose como terciopelo. Para mí, eso cambia las reglas del juego; es el futuro”.
“Cualquiera que vaya a ver Unsane sin saber la historia tras su producción, no tendrán ni idea de que ha sido grabado con un iPhone”, dijo el realizador.
De ahora en adelante, asegura Soderbergh, continuará grabando sus nuevos títulos con un teléfono móvil.
“Hay una especie de obstáculo filosófico con el tamaño de estos dispositivos, pero yo no lo considero un problema a la hora de trabajar. Lo veo, de hecho, como una de las experiencias más liberadoras que he tenido como cineasta, y que quiero seguir teniendo. Lo que sentí, minuto a minuto de rodaje, fue tan significativo que, para mí, esto supone un nuevo capítulo en mi carrera”.
¿En rentable alejarse de los estudios y apostar todas las cartas a las películas indies? Logan Lucky, el último trabajo de bajo presupuesto firmado por Soderbergh, costo 29 millones de dólares, recaudando 8 millones el primer fin de semana y tan solo 28 millones a nivel doméstico.
“Sé que esto será una carrera de fondo”, reconoce Soderbergh, que dice estar trabajando en la manera de hacer de estas producciones algo rentable para todos los involucrados. “Aunque sé que eso me llevará un tiempo”, termina.