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Artículo El #MeToo estalla en la India Culture

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El #MeToo estalla en la India

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Coincidiendo con el aniversario de su explosión en Hollywood, el #MeToo llega con inusitada fuerza a los dominios de Bollywood

PlayGround

09 Octubre 2018 15:06

Un año después de su irrupción en la industria estadounidense, el #MeToo ha empezado a permear en los medios y la cinematografía de India. El movimiento empezaba a articularse la pasada semana, cuando el comediante Utsav Chakraborty fue acusado por Twitter de enviar fotos no solicitadas de su pene a algunas de sus compañeras.

Chakraborty, que admitió las múltiples acusaciones que pesaban sobre él, fue el primero de una infame lista cuya última incorporación es el veterano actor Alok Nath. Acusado por una directora de televisión, que sostiene haber sido agredida sexualmente por Nath hace dos décadas, el intérprete declaró que ni confirmaba ni desmentía la agresión.

“Seguramente sí sucediera”, admitía, “aunque no creo que yo fuese el único”.

Como un presagio, estos últimos días han ido corroborando la corazonada de Nath: ni era el único agresor, ni el abuso de poder se daba sólo en la industria del entretenimiento. Las periodistas, que no sólo han cubierto los casos, sino que los han localizado en sus puestos de trabajo, también se han unido a este #MeToo local con sus propias impugnaciones.

La periodista Sandhya Menon, por ejemplo, señalaría a dos editores jefe por abusar sexualmente de ella. En apenas dos semanas, algunos de los diarios más influyentes del país han visto cómo las acusaciones de acoso sexual y de torpedeo de carreras han ido en aumento, viéndose obligados a abrir investigaciones y a cesar cargos directivos.

A la vez que el #MeToo se convertía en trending topic en India, aparecían más casos que implicaban a periodistas, editores, actores y cineastas: el intérprete Nana Patekar era acusado por la actriz Tanushree Dutta; otra intérprete, esta vez amparada por una minuciosa investigación del HuffPost, señalaba al director Vikas Bahl.

La productora de este último, Phantom, se terminó clausurando este pasado fin de semana.

La oleada no sólo se está llevando por delante a los culpables directos de las agresiones, sino también a sus colaboradores y cómplices: Tanmay Bhat de la All India Bakchod, que admitió conocer el modus operandi de compañeros como Chakraborty, fue apartado de su cargo de CEO en la compañía.

El festival de cine de Mumbai, por su parte, decidió eliminar de su programación una película producida por la misma All India Bakchod.

Aunque esta segunda vida para el #MeToo tiene algunos precedentes en la India, ésta es la primera ocasión en que las figuras acusadas por abusos no son anónimas, así como la vez primera en que las afectadas se ven con la fuerza suficiente para compartir sus historias sin la necesidad de proteger la identidad de sus agresores.

(Vía BBC)

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