Acabamos de descubrir lo que es un “cuchillo de la caca” y vamos a compartir el trauma
Reddit, subforo de confesiones. Un usuario con el seudónimo LearnedButt hace una publicación que cambiará para siempre la forma en la que te sientes al mirar un cuchillo y al usar el baño en casa ajena.
Esta historia va a introducirte al concepto “cuchillo de caca”.
Todo lo que diga a partir de ahora podría arruinar la experiencia, así que sin más spoilers, le damos al play.
“Mi familia caga a lo grande. A lo mejor es genético, a lo mejor es nuestra dieta, pero todo el mundo da a luz a troncos gigantes de mierda. Cuando plantas una mega-caca, ya sabes que a veces al tirar de la cadena no se va. Se queda atravesada en mitad del agujero del fondo de la taza y el vórtice de agua simplemente le hace dar un leve giro mientras se burla de ti.
Creciendo, esto sucedía con tanta frecuencia que mi familia tenía un cuchillo para la caca. Era un viejo y oxidado cuchillo colgado en el cuarto de la lavadora y que solo se utilizaba para ese propósito. Era normal caminar por el pasillo y que alguien te gritara, ‘Ey, puedes pasarme el cuchillo de caca
Pensaba que era un kit estándar. Tienes un desatascador, una escobilla y un cuchillo de caca”.
Uf, too much information. Vayamos por partes, que a estas alturas ya hay varias cosas que me perturban.
La primera, obviamente, el concepto cuchillo de caca en sí.
La segunda, en qué tipo de universo paralelo ha vivido toda su vida para no haberse dado cuenta hasta ser ya un hombre adulto, con los cojones negros, de que eso era una aberración propia de su casa, no de todas las casas.
Y la tercera, por qué pudiendo ponerle un nombre más épico, como “el segador de mierdas”, “el sierratordas” o “la katana del descomer”, tuvieron que llamar al cacharro “cuchillo de caca”.
Pero la historia continúa. Y no mejora. O bueno, sí. Depende de lo que cada uno considere mejorar.
“Fast foward, tengo 22 años. Han pasado un día o dos desde la última vez que cagué, y estoy en casa de un amigo. Mi amigo es el camello local, y tiene ‘invitados’, porque no puedes comprar marihuana sin apalancarte y dar la brasa una hora. Me disculpé y fui al baño a plantar un pino enorme. Miro abajo y veo que es uno de los atravesados, así que abro la puerta y llamo a mi amigo. Llega y le pido su cuchillo de caca.
‘¿Mi qué?’
Tu cuchillo de caca, le dije. Necesito usarlo. Por favor. ‘¿Qué coño es un cuchillo de caca?’
Obviamente, tiene que tener uno, pero a lo mejor le llama de una forma diferente. ¿Una cuchilla fecal? ¿Un divisor de heces? ¿Una guja de guano? Explico lo que es lo que quiero y por qué.
Empieza a darle la risilla. Luego a descojonarse. Entonces un montón de gente empieza a reirse. Resultó que la música se había parado y todo el mundo había escuchado mis ruegos a través de la puerta. Resultó también que ninguno de ellos tenía cuchillos de caca, solo mi jodida familia y sus jodidos intestinos. Puta vida”.
Probablemente a estas alturas pienses que la cosa no puede ponerse más desagradable. Pues agárrate los machos que el remate final es más traumático que pillar a tus padres poniendo los regalos debajo del árbol de Navidad.
“Le conté esta historia a mi mujer ayer por la noche y se quedó fascinada y horrorizada al mismo tiempo. Resulta que ella tampoco sabía lo que era un cuchillo de caca y había estado usando el viejo cuchillo oxidado colgando del armarito del baño para otras cosas. Por suerte no cocinó con él, pero lo utilizó para abrir cajas de Amazon”.
*Acabo de vomitarme un poco en la boca*
“A partir de ahora utilizará su propio cuchillo para estas cosas”.
HOMBRE, PUES MENOS MAL. Que si nos dices que a los dos os pareció buena idea que el cuchillo de caca siga siendo multifunción, pido hora ahora mismo para ligarme las trompas. No quisiera engendrar vida para que venga a parar a un mundo así.
Entre los comentarios de incredulidad y asco, salió una cuestión muy válida y que puede que hayamos pasado por alto aturdidos por el exceso de información.
"¿Cómo limpiabais el cuchillo de caca y por qué no lo guardabais en el baño?".
LearnedButt dijo lo siguiente: "Lo enjuagábamos y luego le pasábamos un trocito de papel higiénico. Lo guardábamos en el cuarto de la lavadora porque estaba entre los tres cuartos de baño. ¿Por qué no teníamos tres cuchillos?. Ni idea. Mientras crecía, el cuchillo de caca era especial. Era uno de los cuchillos de cocina más grandes, Unos 20 cm de hoja, con un mango de madera agujereado para poder colgarlo. Supongo que también podría haberse usado en defensa propia de haber sido necesario, como un salvador de la caca".
Y aclaró: "No tengo ni idea de por qué no teníamos tres cuchillos de caca. Todo lo que sé es que no los teníamos. Teníamos uno, el único. Posiblemente porque mi padre era exageradamente rácano con las cosas más raras. Así que sí, compartíamos el cuchillo de caca".
Como a estas alturas ya debe haberte estallado la cabeza sintiendo todo lo que pensabas saber sobre la especie humana acaba de ser apuñalado por un cuchillo oxidado y adornado con mierda en el fondo de un retrete, ya da igual ir un pasito más allá.
Las malas noticias siguen: el chico del cuchillo de caca y su familia no está solo. Hay más como él.
"Oh Dios mío, mis abuelos tenían uno de estos y lo llamaban 'mashitty' (juego de palabras entre machete y mierda), ¡Pensaba que éramos los únicos! Atasqué una vez el baño de niño y desde entonces cada vez que iba al baño en casa de mis abuelos me gritaban '¿Necesitas el mashitty por ahí?'".
"Nosotros usábamos palillos chinos de usar y tirar".
"Ey, mi familia no tiene un cuchillo de caca, pero tenemos una regla de caca para cortar la caca, así que no estás solo".
Y así es como este cabrón ha conseguido que no vayas a poder volver a hacerte un puto sandwitch de Nutella en tu puta vida.
Miro esta foto y me dan arcadas. En serio. Socorro.
