PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo Declaran parcialmente culpable a una mujer que quedó parapléjica tras una agresión Now

Now

Declaran parcialmente culpable a una mujer que quedó parapléjica tras una agresión

H

VÍA ADOBE STOCK
 

Su expareja la arrojó desde un segundo piso en un claro caso de violencia machista

A.P.G.

08 Enero 2019 11:09

Las autoridades francesas han denegado parcialmente la indemnización por violencia de género a una mujer que quedó parapléjica por culpa de su pareja. El hombre, que ya había sido denunciado numerosas veces por violencia de género, la arrojó por un balcón después de una disputa.

La agresión tuvo lugar en Le Mans (Francia) hace seis años en el domicilio de la víctima, que en ese momento tenía 25 años. Pese a que el hombre fue condenado a 15 años de prisión en 2016, el Fondo de Garantías de Víctimas (FGTI) le ha denegado a la víctima el importe completo de la indemnización de 90.000 euro, según relata el diario regional Le Maine.

"No hay justificación válida ni responsabilidad compartida para que un hombre te lance de un segundo piso"

Esta comisión considera que la mujer solo debe recibir una parte de esta indemnización en tanto, según los mismos, “existe una responsabilidad compartida”. La administración francesa reprocha a la mujer que regresara a su domicilio tras una primera disputa y no encontrara un alojamiento alternativo. Considera que “Aïda cometió una falta civil, negligencia o imprudencia” al volver a su casa con su expareja maltratadora.

O lo que es mismo: se hace recaer nuevamente en la víctima la obligación de defenderse, de no ser agredida, de no quedar parapléjica. En definitiva, de no sufrir violencia. De no ser asesinadas.

Esta resolución ha sido impugnada por los abogados de la víctima, quienes consideran aberrante esta victimización de esta mujer que, además, sufre unas secuelas graves de por vida. La indemnización de los 90.000 euros es vital no solo para subsanar, en parte y solo en parte, los daños morales ocasionados; sino también para sufragar los gastos médicos y de adaptación de su vivienda y vehículo a su discapacidad.

Tanto la Comisión como el Fondo, que se encargan de hacer efectivas las indemnizaciones, coinciden con la misma tesis: Aïda debería haber hecho caso a la policía, que le advirtió en una primera llamada que lo mejor era abandonar el domicilio. Sin embargo, parece evidente que esta advertencia, puntual y desde la distancia, no tiene en cuenta ni las particularidades concretas del caso, la presión psicológica de la mujer en ese momento o las alternativas reales habitacionales —al parecer la mujer intentó contactar con algunos amigos, que no le respondieron; y no había trenes para trasladarse a casa de sus padres, tampoco podía pagarse un taxi—. Sea como sea, los motivos esgrimidos por lo que finalmente decidió volver a su casa son lo menos importante. La mujer estaba en pleno derecho de volver a su domicilio y no por ello acabar parapléjica.

Lo que los abogados de la víctima tratan de defender por todos los medios es que no hay justificación válida ni responsabilidad compartida para que un hombre te lance de un segundo piso. La defensa luchará hasta el final para conseguir el total de la indemnización. El próximo juicio está fechado para el día 27 de mayo.

La secretaria de Estado para la Igualdad Mujer-Hombre, Marlène Schiappa, ha calificado la situación de “profundamente chocante e incomprensible”.

share