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Ocurrió en El Aguaje, un pequeño poblado apodado el “Beverly Hills de Michoacán” porque en la comunidad abundan grandes mansiones de presuntos capos del narcotráfico.
Un convoy de 43 policías estatales salió de Apatzingán en cinco vehículos para cumplir una orden judicial en Aguililla, pero al llegar al Aguaje fueron emboscados por criminales a bordo de camionetas blindadas que les dispararon con armas de grueso calibre: 13 agentes fueron asesinados y 9 sufrieron lesiones.
Michoacán es un estado que históricamente ha atraído turismo, es sede de uno de los principales festivales de cine del país y es conocido por sus playas, sus iglesias, sus tradiciones de Día de Muertos… pero también es territorio de disputa entre bandas criminales.
Como parte de esta lucha, apenas en agosto pasado, 19 cadáveres fueron esparcidos en distintos puntos de Uruapan y algunos de ellos fueron colgados de un puente.
Narcomensajes
Ayer, en el camino de “Beverly Hills” donde fueron abatidos los agentes, los agresores dejaron una cartulina con este mensaje: “A todos los policías michoacanos lacras que apoyen Los Templarios, Viagras, Troyanos y Chocomiles de Tepeque se los cargara la verga. ATT: CJNG (sic)”.
Agentes patrullando el área donde ocurrió el ataque.
CJNG son las siglas de uno de los grupos del narcotráfico que más poder ha adquirido en los últimos años: Cártel Jalisco Nueva Generación. Su líder, Nemesio Oseguera “El Mencho”, es originario de Aguililla, municipio donde también surgió la banda Los Cuinis, de los hermanos González Valencia.
El ataque ocurrió la mañana de este lunes 14 de octubre y, casi al mismo tiempo, en Ciudad de México, el Secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, afirmó —quizá sin saber aún lo que había ocurrido en Michoacán— que las autoridades ya habían logrado un “punto de inflexión” en la violencia.
Por la tarde, el Twitter mexicano se inundó con audios de las llamadas de auxilio que hicieron los policías emboscados. “¡Me estoy muriendo!”, gritó uno de ellos.
En redes sociales circulan audios de policias estatales de #Michoacán pidiendo apoyo cuando son emboscados en Aguililla. Se escuchan quejidos de un oficial herido que dice "me estoy muriendo " Otro reacciona furioso porque no reciben respuesta. En el ataque murieron 14 elementos. pic.twitter.com/j2jluRHXBt
El gobernador del estado, Silvano Aureoles, informó que los oficiales estaban atendiendo un mandato de un juez de lo familiar, es decir, ni siquiera estaban en la zona por un operativo contra el narco.
