El monstruo de la gimnasia estadounidense aguantó el chaparrón cabizbajo. "¿Estás arrepentido por todas la vidas que cambiaste para siempre?"
Larry Nassar abusó de más de 130 atletas en sus 20 años como doctor del equipo de gimnasia estadounidense. La última en hacerlo público ha sido Simone Biles, y ahora varias de las víctimas han testificado ante el tribunal de Lansing -Michigan- que está juzgando el caso.
En el juicio estaba presente el médico de 54 años sin poder responder a los testimonios, aunque tuvo que aguantar cara a cara cómo desvelaban sus crímenes.
"Fui la primera en testificar. Me dirijo a ustedes en público como un paso final y una declaración para mí misma de que no tengo nada de qué avergonzarme. Como la única víctima no médica que se presenta, testifico para que el mundo sepa que eres un repulsivo mentiroso", declaró con rabia Kyle Stephens, que a diferencia de otras víctimas, no tiene nada que ver con el atletismo.
Sus padres eran amigos de Nassar y prefirieron creerle a él cuando les contó que había sufrido abusos desde los 6 a los 12 años.
Stephens culpó al médico del suicidio de su padre en 2016, ya que le había convencido hace años de que ella era una mentirosa, lo que hizo que no pudiera convivir con el sentimiento de culpa al enterarse de la verdad.
Nassar abusaba de Stephens cuando visitaba a la familia, en su propia casa. "Expuso sus genitales en una oscura sala del sótano y me dijo: 'Si alguna vez quieres verlos, todo lo que tienes que hacer es pedirlo'", relató la víctima, que develó que una vez Nassar comenzó a masturbarse y penetró su vagina con sus dedos en la misma casa en la que estaban sus padres, su hermano, la esposa del médico y sus hijos.
Gimnastas como Alexis Moore fueron muy crudas declarando. "Traicionó mi confianza, se aprovechó de mi juventud y abusó de mí cientos de veces", dijo mirándole a los ojos a Nassar, que escuchaba sus palabras cabizbajo. "¿Estás arrepentido por todas la vidas que cambiaste para siempre?", le preguntó.
Jade Capua también dejó a los presentes con mal cuerpo. "Me robó la inocencia, la privacidad, la seguridad y la confianza. Me cambió la vida".
Quizá el testimonio más desgarrador fue el de Donna Markham, la madre de Chelsea Markham, una ex atleta que sufrió los abusos de Nassar desde los 9 años y que decidió dejar la gimnasia a los 13.
Aquellas sesiones le produjeron un trauma de por vida, empezó a consumir drogas y terminó suicidándose en 2009. Tenía 23 años.
"Ella se quitó la vida porque no lograba lidiar con el dolor. El año que viene se cumplirán diez años desde que perdí a mi bebé. Ella tenía 23 años. Todo el día siento su falta. Y todo comenzó con él. Todo esto comenzó con él", declaró la madre entre lágrimas.
Tanto las víctimas como sus familias están expectantes por conocer la condena definitiva para Nassar, aunque nadie espera algo inferior a la cadena perpetua.
Solo él sabrá si una vida entera por delante es suficiente para meditar sobre todo lo que hizo...
