PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo 'Legends', la rocambolesca historia de una gran estafa cometida “en nombre de Netflix” Culture

Culture

'Legends', la rocambolesca historia de una gran estafa cometida “en nombre de Netflix”

H

 

Esta es la historia de una película que podría haber competido con Marvel... si hubiese existido

PlayGround

30 Septiembre 2019 20:02

Legends parecía destinada a arrasar en taquilla. Su guionista Adam Joiner la presentaba como una especie de Avengers en versión steampunk. “Un mash-up anacrónico de figuras legendarias e históricas de los Estados Unidos del siglo XIX, como Davy Crockett, Calamity Jane, Paul Bunyan y John Henry”, según su pitch. Vendía la película como una epopeya hecha a medida para el insaciable apetito actual por la épica fantasiosa. El reparto estaría plagado de estrellas y Netflix se encargaría de su distribución.

Con esos argumentos, Joiner logró reunir más de 14 millones de dólares de varias firmas con ganas de participar en la producción del filme. ¿El problema? Más allá de su guión, Legends no existía, y nunca existiría.

El FBI detuvo recientemente a Joiner. Está acusado estafar esos 14 millones de dólares que recibió de sus inversores. La maor parte de ese dinero ha desaparecido. O mejor dicho, está gastado. Entre otras cosas, Joiner se compró una casa de 6 millones en Manhattan Beach con el dinero destinado a la película. Pero no adelantemos acontecimientos.

El "aval" Netflix

Según ha revelado un comunicado del Departamento de Justicia estadounidense, todo empezó en 2015. Ese año Joiner conoció al director de una firma de inversión coreana y le dio un guión de Legends, afirmando que lo había escrito su hermano.

A través de una empresa llamada Dark Planet Pictures, LLC, les pidió financiación para poder llevar adelante el proyecto. El supuesto productor convenció a la firma de que Netflix había aceptado distribuir la película. Para ello utilizó copias de supuestos emails y documentos que aparentemente habían sido firmados por ejecutivos del gigante del streaming. Pero resultaron ser falsificaciones.

La firma aceptó invertir 8 millones de dólares en el proyecto, transfiriendo la mitad del dinero en abril de 2016. Poco después, Joiner repitió la jugada con la firma de inversión china PGA Yungpark Capital, Ltd, que en junio de ese mismo año transfirió 6 millones de dólares a la cuenta bancaria de Dark Planet Pictures.

Con 10 millones en el bolsillo, Joiner siguió maniobrando. Comunicó a sus inversores que había llegado a un acuerdo con el prominente productor Don Murphy, conocido por haber producido la saga Transformers. Él sería el productor ejecutivo de Legends.

Aunque era cierto que Murphy había sido contratado para hacer gestiones para la película, los documentos judiciales muestran que este canceló el acuerdo en 2017 cuando vio que no había ningún distribuidor identificado, ningún talento contratado y ningún director comprometido a dirigirla.

En distintos emails enviados a sus inversores, Joiner había citado a nombres como Michael Bay o Guillermo del Toro como posibles candidatos a dirigir Legends. Pero nada de esto era cierto.

En su huida hacia adelante, Joiner dijo a sus inversores que había rescindido el acuerdo con Netflix pero que había llegado a un nuevo trato con Amblin Partners, la productora de Steven Spielberg. Eso fue suficiente para asegurarse la segunda mitad de la inversión de 8 millones de la firma coreana, que fue transferida a Dark Planet a principios del 2017. Según los ejecutivos de Netflix y Amblin, ninguno de los dos acuerdos había existido nunca.

De acuerdo a la denuncia, cuando los inversores empezaron a impacientarse por la falta de noticias sobre el proyecto, Joiner les dio una serie de excusas y les mostró un extracto bancario falsificado para demostrar que podría devolverles la totalidad del dinero.

La realidad es que Joiner se estaba gastando el dinero en sí mismo. El FBI descubrió que 5 millones habían sido utilizados para comprar la citada casa en Manhattan Beach, mientras que otras 4,3 millones habían sido transferidos a una cuenta bancaria separada que podría estar conectada con otra película que estaría desarrollando.

Nuestro hombre se enfrenta ahora a una lista de cargos que incluyen el fraude electrónico, el lavado de dinero y el robo de identidad agravado. Si es declarado culpable podría pasar hasta 32 años en prisión.

El caso de Legends se suma a la creciente lista de estafas que tienen a Hollywood como trasfondo. “Todo el mundo ama las películas estadounidenses, todo el mundo ama la música estadounidense. Si eres un nuevo millonario o multimillonario chino, por supuesto que querrás invertir dinero en lo que parece ser una producción de Hollywood de renombre”, explica la directora de la firma de investigación privada K2 Intelligence, Snežana Gebauer, a The Guardian.

Gebaurer también especula que el lavado de dinero podría estar detrás de los fondos que consiguió Joiner. De ser así el caso recordaría al de Riza Aziz, el productor de El Lobo de Wall Street que está siendo juzgado en Malasia por presuntamente canalizar fondos robados del fondo de riqueza soberana del país a través del proyecto cinematográfico.

A diferencia de la película de Martin Scorsese, sin embargo, Legends nunca verá la luz del proyector. ¿Lo más decepcionante del caso? Según insiders de la industria el proyecto lo tenía todo para ser una producción de éxito.

share